VUELO JK5022 DE SPANAIR CON DESTINO A CANARIAS

Tragedia aérea en Barajas con 153 víctimas mortales

Un avión de la compañía Spanair se salió de la pista 36 en la T-4 de Barajas segundos después de despegar y terminó estrellándose en las cercanías del aeropuerto madrileño. Un total de 172 personas, entre tripulantes y pasajeros, viajaban en la aeronave y tan solo 19 han sobrevivido.

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, confirmaba la identificación, a primera hora de la mañana, de 14 de las 153 víctimas mortales del accidente aéreo de un avión de Spanair que se estrellaba en el aeropuerto de Barajas y que dejaba 19 heridos, cuatro de ellos muy graves.

 

La noticia sacudía a los españoles alrededor de las 15.00 horas de la tarde, minutos después de sucederse el trágico accidente. Sobre las 14:45 horas, el vuelo JK 5022 con destino a Gran Canaria de la compañía Spanair tuvo problemas cuando se disponía a despegar de la pista 36 en la Terminal 4, se salió de la pista y terminó incendiándose.

 

El siniestro se produjo en un segundo intento de despegue del avión, después de que el comandante hiciera volver a la aeronave al aeropuerto, al detectar "una incidencia", reconoció la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez.


En una conferencia de prensa en el aeropuerto de Barajas junto al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, Álvarez explicó que los datos contrastados con Spanair permiten cifrar en 153 el número de muertos, mientras que en los hospitales madrileños quedan 19 heridos, de los que todavía hay dos "sin reconocer", y en el lugar del accidente continúan los trabajos de rescate.


La ministra, que proporcionó algunos detalles de lo que sucedió con el avión antes de despegar, precisó que la aeronave había salido ya con anterioridad de Barajas en un primer intento de emprender viaje a Las Palmas, pero había vuelto al aeropuerto al comprobar el comandante que había "una incidencia".


En estas circunstancias, según indicó Álvarez, el procedimiento habitual es que la empresa de mantenimiento de la aeronave, "que en este caso es la propia Spanair", analiza el incidente y decide si el avión puede volar. "Nosotros sabemos que el avión volvió; el contenido de las decisiones que se tomaron a raíz de esta incidencia se podrá averiguar a través de la 'caja negra' (del avión) y de la documentación", subrayó la ministra.


Sobre el intento de despegue en el que se produjo el siniestro, Álvarez señaló que "el avión levantó las ruedas delanteras y seguramente también las traseras, pero eso también se está investigando". La comisión de investigación está compuesta por "siete personas independientes", que están recogiendo "todo tipo de pruebas sobre el accidente", como imágenes, tejido, documentación o la información que aportará la "caja negra" del avión, que recoge todas las decisiones adoptadas en la aeronave.


Fuentes de Spanair aseguraron que el comandante informó antes de iniciar el vuelo de una avería relacionada con el indicador exterior de temperatura, "que se reparó según los procedimientos establecidos por técnicos de la compañía".


La titular de Fomento explicó asimismo que las embajadas extranjeras han mostrado una "gran preocupación", al desconocerse la nacionalidad de las víctimas, y anunció que el Ejecutivo se pondrá en contacto con las representaciones diplomáticas de los países con compatriotas entre las víctimas, una vez que Spanair ha hecho públicos los datos sobre los pasajeros, disponibles en la página web de AENA.

 

El Gobierno, con las familias

 

Por su parte, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció que "todo el gobierno esta lógicamente conmocionado, muy afectado, como están todos los ciudadanos españoles por esta tragedia que hoy nos asola". Aseguró que la Comisión de Investigación iniciará sus trabajos "inmediatamente" para determinar las causas del accidente. Afirmó que el Gobierno volcará todos sus esfuerzos con los familiares y destacó la coordinación entre el Gobierno con la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid.


Zapatero se refirió a lo que ya había anunciado la ministra de Fomento y precisó que "conforme a los protocolos establecidos, la Comisión Técnica de Investigación, que es a la que corresponde determinar las causas y las circunstancias de este gravísimo accidente, empiece a trabajar inmediatamente y conforme está establecido determinará las causas y las circunstancias".

Posible incendio de un motor

 

El avión de la compañía Spanair se salió de la pista pocos segundos después de despegar cuando, al parecer, pudo incendiarse uno de sus motores y terminó estrellándose en las cercanías de la Terminal 4. El impacto provocó un pequeño incendio que fue extinguido una hora y media despúes.

 

El vuelo JK5022, que hacía la ruta Madrid-Gran Canaria, operaba en código compartido con Lufthansa (LH2554). El aparato siniestrado era un MD-82 de Boeing, tenía 15 años de antigüedad y llevaba 9 operando en la compañía.

 

Un comandante aéreo de la compañía Air Europa aseguró que el avión sufrió un retraso en su despegue debido a un problema en la indicación de la temperatura. El piloto explicó que este desajuste no puede tener relación alguna con el motor del aparato cuya disfunción durante el despegue podría haber originado la catástrofe.


"El aparato fue hacia la pista y volvió por un problema de indicación de temperatura, que es completamente ajeno a lo que sucedió después", dijo. El comandante añadió que hasta el momento el modelo MD 82 ha sido "un avión muy fiable". Añadió que las especulaciones que manejan los pilotos "van desde que un pájaro pudiera haberse introducido en el motor hasta que pueda haberse producido un fallo mecánico, lo cual es muy difícil hoy por hoy".


Este experto puso de manifiesto que el despegue es el momento más peligroso del vuelo y destacó que el aparato carga en un salida con la máxima capacidad de combustible para poder. Para levantar el vuelo un avión alcanza en ese momento velocidades de entre 135 y 145 nudos (entre 220 y 230 kilómetros por hora).

 

Las cajas negras del avión han pasado a disposición del juez encargado de la investigación, David Pérez, titular del Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid, que ha solicitado un informe sobre su contenido y ha declarado la causa secreta, informaron fuentes jurídicas.

IFEMA, de luto


Entre los pasajeros del avión siniestrado, según la lista que ha facilitado la compañía aérea y en la que no se especifica si han fallecido o han resultado heridos, viajaban veintidós niños. A su vez, los cadáveres ya rescatados han sido trasladados al recinto ferial IFEMA, adonde también se están desplazando los familiares para contribuir en los trabajos de identificación.


Alrededor de 70 psicólogos y peritos forenses ayudan a los parientes en las fases iniciales del proceso de identificación, que se está llevando a cabo en cuatro salas habilitadas por orden alfabético. Muchos de los familiares, visiblemente afectados, han sido atendidos en la puerta norte del recinto ferial por el cuerpo de psicólogos movilizados por Samur-Protección Civil, así como por los voluntarios desplazados a la zona y otros profesionales de organismos públicos.


El juez que se ha hecho cargo de la investigación del accidente aéreo ha prohibido la difusión a los medios de las imágenes del suceso captadas por los miembros de Emergencias Madrid, según informaron fuentes jurídicas.