Puede decirse que la navidad ha dado comienzo ya en Zaragoza. Y es que desde hace casi una década, ese momento -que ya podríamos denominar oficial- llega con el encendido de luces del tradicional Mercadillo Navideño contra el Cáncer de la plaza de los Sitios, que este año alcanza su novena edición. Un lugar de encuentro para realizar las compras de fin de año contribuyendo a una buena causa. Como explicó el presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) en Aragón, José Antonio Méndez, "esta plaza va a ser un punto de luz y solidaridad".

Méndez aseguró ante decenas de asociados, amigos y familiares, que el mercadillo sirve "para poner de manifiesto que la asociación está en la ciudad luchando contra el cáncer", así como para "buscar recursos económicos que irán destinados a la investigación oncológica de excelencia, que es la mejor medicina para los pacientes".

Junto a él, la consejera de Salud del Gobierno de Aragón, Luisa María Noeno, y la consejera de Servicios Públicos del Ayuntamiento de Zaragoza, Carmen Dueso, pulsaron el botón de encendido que iluminó la plaza con miles de bombillas ante el aplauso del público. Mientras Noeno destacó que "la palabra cáncer ya no genera tanto miedo como antes gracias a los avances médicos" y a la labor de asociaciones como la AECC, Dueso hizo una "especial mención a los más de cien voluntarios que hacen realidad esta iniciativa".

A continuación, la coordinadora del mercadillo, Catalina Teixeira, guió una visita por los doce puntos de venta instalados este año, que ofrecen productos que van desde los juguetes, hasta el menaje navideño, pasando por libros, alimentación e incluso lotería. Como señaló Teixeira, acompañada por el gerente de AECC Zaragoza, Patxi García, "el mercadillo se comienza a preparar en primavera", y destacó la labor de "muchas personas que trabajan todos los días con mucho amor", por lo que animó a los zaragozanos a visitar las casetas de este año.

Algo que quiso hacer desde el primer día María González, directora de la Obra Social de CAI, porque "es una forma muy bonita de colaborar". Para mañana se espera la visita de María Menéndez-Ponte, premio Cervantes Chico en 2007, para firmar ejemplares de sus obras. Para todo aquel que se anime, tiene hasta el 12 de diciembre.