RAMONCÍN

«Mis abdominales son más bonitos que los de Aznar»

Entrevista con el cantante Ramoncín

Ramoncín, en una playa de Barcelona.
«Mis abdominales son más bonitos que los de Aznar»
M. B.

Tiene 55 años, ¿cuál ha sido su pacto con el diablo?

No lo tengo muy claro, pero al final voy a tener que montar una tienda de cosméticos (risas). Me cuido mucho desde los 25. Ni fumo, ni bebo, ni me drogo...

¿Algo de botox que declarar?

Todavía no. A los hombres se les queda una cara muy rarita.

¿Enseñaría sus abdominales como Aznar?

Los míos son más bonitos; tengo una buena tabla de fregar...

Nunca cena. ¿Se está preparando para 'Supervivientes' o para desfilar en Cibeles?

Lo recomiendo porque es una comida inútil que no se metaboliza. Y no tengo ni la estatura para Cibeles ni las tragaderas para el 'reality'.

También dijo eso de que a los 25 no se fumaba ni un porro más, ¿lo ha cumplido?

Sí. Es mejor retirarse a los 30 de las cosas malas a que te retiren obligatoriamente a los 50. Ahora doy una calada a un cigarro y me mareo.

¿Le siguen corriendo litros de alcohol por sus venas?

(Risas). Es buenísimo que sea mi canción más famosa y que yo no beba alcohol.

¿Cómo le sale el pollo frito?

Le tengo un poquito de asco; me gusta más asado. Cometí el error de cantar ese tema en primera persona y me cayó el mote. Hubo un momento en que me sentaba mal. Ahora lo asumo.

De lo que estará frito ahora es de la SGAE...

Más que frito es como un infierno, un asador. Hay que esperar a que haya un juicio. En cualquier caso, si en la SGAE se ha producido un expolio, el dinero que se han llevado es nuestro, no de los ciudadanos.

¿Se siente Jesucristo por lo de la crucifixión?

Mi nueva canción, 'Quemando puentes', dice: «Nadie me dijo que por la verdad el beso de Judas llevaré conmigo». Pero no me siento Jesucristo... es una manera de hablar. Eso sí, decir la verdad se paga muy caro.

¿Se ha asomado a internet a leer ironías como «Ramoncín denuncia a su madre por llevar una foto suya en la cartera»?

No tengo el menor interés en lo que dicen personas anónimas. Como el trasfondo es muy serio, personalmente no me hace ninguna gracia.

Por la calle no le tirarán cosas como en el Viñarock, ¿no?

A mí la gente me quiere muchísimo y por la calle me tiran besos.

¿Se dejará un buen pastizal en abogados?

No. Lo estrictamente necesario y como hasta ahora lo hemos ganado todo, ni un duro.

Ramoncín también para la intimidad o ahí ya es Ramón...

Mis amigos me llaman Ramón. En castellano el 'cin' no es un diminutivo, por lo tanto Ramoncín es un nombre de guerra.

¿Usted es un gran guerrero?

No, no (risas). Los grandes guerreros están en los libros.

Hablando del diablo (su nuevo disco se llama 'Cuando el diablo canta'), ¿le van los cuernos?

No, a mí no me gustan los cuernos en ninguna dirección. Los cuernos en las plazas de toros.

No me lo veo como padre de cuatro hijos...

Amanecí muy pronto a un tipo determinado de emociones y tengo hijos mayores y pequeños que me hacen la vida más feliz.

¡Y de tres madres distintas! Será todo un don Juan...

Mi relación con el mundo femenino ha sido siempre divertida, agradable y completa.

Sabina invitó a los príncipes a cenar, ¿usted lo haría?

No, porque yo soy republicano de verdad. Bueno, esa sería la respuesta fácil. La respuesta real sería que los príncipes no admitirían venir a una cena conmigo.

De morderse la lengua nada...

Hay ya una sensación dentro de mí que me va diciendo que en algunas cosas es mejor mordérsela. No tengo de mártir ni la r. Prefiero ir a lo mío y el resto que se busque la vida.