SOMALIA

Los piratas somalíes multiplican los secuestros e incidentes en el Golfo de Aden

Un barco griego, un pesquero tailandés y un cargero de Hong Kong, fueron secuestrados en un solo día por los piratas somalíes que ya han iniciado las negociaciones por el carguero saudí que también tienen retenido.

Los incidentes en aguas del Golfo de Adén con piratas somalíes se han multiplicado en las últimas horas, en las que han secuestrado varios barcos y se han enfrentado a tiros con otro, mientras aseguran negociar el rescate de uno de los navíos en su poder.


Tras el secuestro el pasado fin de semana del petrolero saudí "Sirius Star", al menos tres naves más, un pesquero operado por Tailandia, un carguero con bandera de Hong Kong y un barco griego, han sido capturadas en aguas somalíes, según fuentes marítimas.


El pesquero, con bandera de Kiribati y 16 marineros a bordo, y el carguero de Hong Kong, operado por una compañía iraní y con 25 tripulantes, viajaban hacia Oriente Medio cuando fueron asaltados por los piratas, informó la Agencia Marítima Internacional (OMI), con sede en Kuala Lumpur.


Antes de que se cortaran las comunicaciones, el pesquero pudo informar de que dos lanchas rápidas tripuladas por 5 o 6 piratas cada una abordaron la nave.


También fue capturado un barco griego, informó Andrew Mwangura, director del Programa de Asistencia Marítima (PAM), con sede en el puerto keniano de Mombasa, aunque las autoridades griegas dijeron que no disponen de datos que confirmen este secuestro.


"De este último barco todavía se sabe muy poco. No tenemos idea de cuánta gente va a bordo ni del nombre de la embarcación", dijo Mwangura, quien agregó que el superpetrolero saudí secuestrado está desde ayer fondeado a cinco millas de la costa de Eyl, en la región de Puntlandia, en el noreste de Somalia.


Los piratas que secuestraron el "Sirius Star", con capacidad para dos millones de barriles de petróleo, exigen ahora un rescate "en efectivo" y aseguran que ya "hay negociadores" en el barco, según una grabación atribuida a uno de los corsarios y difunda por la televisión qatarí Al Yazira.


"Cuando se llegue a un acuerdo sobre el rescate, se pagará en efectivo en el barco (secuestrado) y garantizaremos la seguridad de la embarcación que lo traiga", afirmó el supuesto secuestrador, identificado como Farah Abd Yame.


En la breve cinta, dice que "hay negociadores a bordo del barco y en tierra", pero no detalla el monto que exige para la liberación, además de advertir de que disponen de una máquina capaz de "reconocer el dinero falso".

Con cómplices en tierra


Los piratas, que cuentan con cómplices en tierra que utilizan equipos de alta tecnología para captar comunicaciones y hacer el seguimiento de los buques, además de evitar ataques de los barcos de las armadas de varios países en la zona, también se han enfrentado a tiros en las últimas horas con una fragata india de patrulla.


El tiroteo se produjo este martes y fue iniciado por los piratas cuando la fragata india intentaba detener el barco, al sospechar que se trataba de una nave pirata cuya presencia en la zona había sido denunciada en varias ocasiones, dijo la portavoz de la Armada india Neerad Sinha a la agencia IANS.


Después de que los piratas, que iban armados con ametralladoras y lanzagranadas, abriesen fuego, los marinos indios respondieron, lo que desencadenó varias explosiones y un incendio en la nave pirata, provocados, al parecer, por las municiones que llevaba.


Los piratas se dieron a la fuga en las dos lanchas que el "barco nodriza" llevaba a remolque.


Según los datos de la OMI, son 18 los barcos que están en manos de piratas somalís en este momento, con más de 300 marineros, al menos 127 de ellos filipinos.


La capacidad y distancia de actuación de los piratas se ha ampliado en gran medida, como demuestra el secuestro del "Sirius Star", que abordaron a unas 900 millas náuticas (unos 1.700 kilómetros) de Eyl, en la región de Puntlandia, en el norte de Somalia, donde lo llevaron posteriormente.


Las aguas del Golfo de Adén son consideradas ahora las más peligrosas del mundo junto a las de Nigeria, desplazando del primer puesto en cuanto a riesgo al Estrecho de Malaca, antaño la ruta marítima más insegura.