“En vez de un jardín, tenemos un basurero”

En los Enlaces, en la confluencia de Vía Hispanidad y la antigua carretera de Madrid, hay un solar que alguna vez debió de ser un jardín. Ahora es un vertedero, con basuras, botellas, excrementos de perros, restos de comida, colchones, coches mal aparcados, etcétera, como denuncia un vecino de la zona, Ángel Maqueda.

“Acostumbro a pasear por el Parque Hispanidad y el corredor verde Oliver-Valdefierro. Las obras que están remodelando la vieja carretera de Madrid, desde el nudo de los Enlaces hasta la entrada a Valdefierro y Miralbueno, van a dejar una zona muy agradable y humanizada. Pero justo al llegar a la entrada de Vía Hispanidad, nos encontramos con un vertedero urbano. Antes era una zona ajardinada y con arbolado, pero ahora está totalmente abandonada. No queda hierba y nadie viene a recoger la basura. Da pena y vergüenza”, afirma Ángel Maqueda, vecino de la Urbanización Parque Hispanidad, frente al solar.

El terreno está situado tras una pequeña gasolinera en desuso (hay otra estación de servicio justo enfrente, más grande y con mucha actividad). “Dado que es uno de los puntos de entrada a la ciudad, no sería mucho pedir que el Ayuntamiento realizara un adecentamiento de este vertedero, volviendo a transformarlo en una zona verde y agradable”, apunta este vecino.

La situación no es nueva para los vecinos de la zona, que lo han denunciado en varias ocasiones. “Hace unos meses enviamos un escrito al Ayuntamiento para denunciar la situación por medio del buzón de sugerencias en la web municipal. Contestaron que lo tendrían en cuenta”, añade.

A pocos metros, las zonas ajardinadas de Vía Hispanidad están en perfecto estado. “Nosotros no tenemos asignada esa zona. Ahí no limpia nadie. No sabemos si es porque al ser el límite con la carretera de Madrid no corresponde al Ayuntamiento”, apuntan dos operarios de Parques y Jardines que trabajan recogiendo hojas en los jardines y aceras de Vía Hispanidad.

Fuentes de Urbanismo explican que no es un solar municipal y, por lo tanto, el Ayuntamiento no tiene obligación de mantenerlo limpio ni de cuidar el césped. El titular de una propiedad es quien debe mantenerla en buen estado. En estos casos, el Ayuntamiento puede ordenar una inspección y requerir al propietario que actúe. Y, en última instancia, podría acometer la limpieza de manera subsidiaria.