DESDE LA ESTACIÓN ESPACIAL INTERNACIONAL

El Endeavour regresa después de completar su misión

La nave espacial ha aterrizado en Cape Canaveral, Florida, EE. UU
El Endeavour regresa después de completar su misión
REUTERS. Scott Audette

El transbordador Endeavour ha aterrizado en Cabo Cañaveral tras completar una exitosa misión de 16 días a la Estación Espacial Internacional (EEI), durante la cual ha concluido la instalación del laboratorio científico japonés Kibo.


La nave con sus siete tripulantes ha descendido sobre la pista del Centro Espacial Kennedy en Florida a las 14.48 GMT, exactamente la hora prevista, tras disiparse una leve amenaza de lluvias sobre la región. El aterrizaje se ha producido sin ningún contratiempo y la nave tomó tierra limpiamente.


"Endeavour, bien hecho. Ya están de regreso en casa. Enhorabuena por una misión muy bien llevada a cabo", ha dicho el control de la misión en el Centro Johnson de Vuelos Espaciales de la NASA en Houston (Texas) luego de que la nave tocara la pista de aterrizaje.


"Gracias a todos ustedes. Hemos hecho nuestro trabajo y eso es de lo que se trataba", ha contestado el comandante Mark Polansky en nombre de la tripulación.


En el curso de su misión, los tripulantes del transbordador sustituyeron seis baterías del complejo espacial y entregaron vituallas y equipos a sus seis ocupantes, además de ajustar piezas y sistemas del complejo que gira en una órbita a casi 400 kilómetros de la Tierra.


El final de la misión ha tenido muchos menos contratiempos que su comienzo, ya que el lanzamiento del Endeavour tuvo que aplazarse primero por filtraciones de combustible en el tanque externo de la nave en dos ocasiones y después por la amenaza de una cadena de tormentas eléctricas en la zona central de la Florida.


La seguridad del transbordador también se vio amenazada en el momento del lanzamiento cuando una de las losetas del escudo térmico pareció golpear su estructura.


En una última revisión, Polansky y el piloto Doug Hurley determinaron que todos los sistemas "están funcionando perfectamente", dijo la NASA en un comunicado emitido poco antes de que la nave encendiera los motores para abandonar la órbita y comenzara su descenso. Antes de iniciar el regreso, la tripulación puso en órbita dos pares de pequeños satélites.


Uno de ellos se utilizará en el estudio del acoplamiento de naves en el espacio mediante el GPS, mientras que el otro medirá la composición y densidad de la tenue atmósfera a más de 320 kilómetros de la Tierra.

Próximo viaje del transbordador


Al tiempo que llegaba el Endeavour a Florida, la NASA ya debía comenzar los preparativos para el lanzamiento de la siguiente misión, la del transbordador Atlantis, que tiene prevista su partida hacia la EEI el 18 de agosto. En esa misión, la tripulación incluirá por vez primera a dos astronautas hispanos, ambos de origen mexicano.


Se trata de los especialistas John "Danny" Olivas y José Hernández, que integrarán la tripulación comandada por el coronel del Cuerpo de Infantes de Marina Frederick Sturckow, junto al piloto Kevin Ford y los también especialistas Patrick Forrester y el astronauta sueco Christer Fuglesang, de la Agencia Espacial Europea (ESA).


Olivas está considerado uno de los astronautas veteranos de la NASA y ya realizó dos caminatas espaciales durante la misión STS-117 en 2007. Para Hernández, un ingeniero informático seleccionado como astronauta en 2004, será la primera aventura en el espacio.


El objetivo principal de la misión del Atlantis será instalar un módulo logístico que servirá como laboratorio científico y centro de almacenamiento de la EEI. Durante las dos caminatas previstas también se recogerá material de experimentación científica instalado en el módulo "Columbus" de la ESA.


La NASA quiere apresurarse en el envío de la mayor carga pesada posible a la EEI en los próximos doce meses, antes de que en septiembre de 2010 parta hacia la estación espacial el último vuelo de los transbordadores.


La agencia espacial dedicará los próximos años al diseño de una nueva nave que sustituya a los obsoletos transbordadores y pueda cumplir el objetivo de llevar de nuevo al hombre a la Luna a partir de 2020.