PODRÁN CAMINAR Y SUBIR ESCALERAS

Crean un "roboesqueleto" que permite andar a los parapléjicos

El "roboesqueleto", llamado ReWalk, consiste de tensores en las piernas y un dispositivo que el usuario lleva en una bolsa en la espalda, y la persona afectada selecciona la actividad que desea llevar a cabo desde una pulsera de control remoto.

Un invento científico ha logrado ayudar a parapléjicos - personas que sufren parálisis de la cintura para abajo- a hacer lo que hasta ahora les había sido imposible: pararse, caminar y subir escaleras. El "roboesqueleto", llamado ReWalk, consiste de tensores en las piernas y un dispositivo que el usuario lleva en una bolsa en la espalda, y la persona afectada selecciona la actividad que desea llevar a cabo desde una pulsera de control remoto. Cuando el usuario se inclina se activan los sensores corporales encargados de poner en movimiento a las piernas robóticas. La persona camina con muletas y controla el traje con los cambios en el centro de gravedad y los movimientos en la parte superior del cuerpo.

 

El aparato, afirman los científicos de la empresa tecnológica israelí Argo Medical Technologies, imita en efecto los movimientos del exoesqueleto de un cangrejo. ReWalk fue creado por el ingeniero Amit Goffer, cuya propia parálisis lo llevó a buscar otra alternativa para su movilidad que no fuera la silla de ruedas. "Me sorprende que en pleno siglo XXI, cuando el cambio se mide en nanosegundos, todavía haya más de cinco millones de personas con discapacidad de movimiento en el mundo desarrollado para quienes ha habido muy pocos cambios desde 1900", dice Goffer.

 

En efecto, hasta ahora la silla de ruedas, con el impacto físico y mental que representa, ha sido la única alternativa para las personas que sufren parálisis. El traje robótico está ya en etapa de pruebas clínicas en el Centro Médico Sheba en Tel Aviv. Uno de los primeros usuarios es Radi Kaiof, un ex paracaidista israelí que quedó parapléjico desde hace 20 años tras una lesión que sufrió durante su servicio en el ejército israelí. El aparato, dice Kaiof, le ha cambiado la vida.

 

"Nunca soñé que podría caminar otra vez. Después de que fui herido olvidé lo que era, y ahora que puedo pararme puedo sentir lo alto que soy y hablar con la gente al mismo nivel y no mirándola desde abajo", afirma. Según la compañía, debido a que ReWalk mantiene al usuario erguido diariamente y ejercita los miembros paralizados con el movimiento, éste puede aliviar muchos de los problemas de salud asociados con el uso a largo plazo de la silla de ruedas. Además, dicen sus creadores, el aparato puede tener un fuerte impacto en el costo de los servicios de salud ya que evita el uso de elevadores y camas especiales, sillas de rueda motorizadas y otros aparatos y adaptaciones de movilidad.

 

ReWalk, sin embargo, sólo es una buena opción para las personas que todavía pueden controlar el movimiento de manos y hombros, necesario para controlar las muletas que sirven como herramienta de estabilización. La compañía espera llevar a cabo pruebas clínicas en Estados Unidos en noviembre próximo y posteriormente solicitará aprobación de las autoridades sanitarias en ese país.