Kiko Rivera anunció que tenía intención de retirar a su tío Agustín Pantoja la demanda que le había interpuesto por presuntos delitos de estafa, administración desleal y apropiación indebida. Sin embargo parece que no ha hecho falta ya que antes los juzgados de Chiclana de la Frontera la han archivado. Al parecer, la defensa del hermano de la tonadillera pudo demostrar que el dinero obtenido por el alquiler de Cantora fue utilizado para abonar la multa impuesta a la cantante por la Audiencia Provincial de Málaga una vez que el dj autorizó su utilización para ese fin mediante un acuerdo verbal.

El marido de Irene Rosales había denunciado a su tío al considerar que había firmado y cobrado contratos de alquiler de Cantora sin su conocimiento a pesar de que él es el propietario del 47% de la finca heredada de su padre, el malogrado Francisco Rivera 'Paquirri'.

La familia está pasando por uno de sus momentos más duros ya que se encuentra completamente dividida. La participación de Kiko Rivera en 'La herencia envenenada' y las diferentes entrevistas exclusivas en las revistas en las que ha acusado a su madre de haberse quedado con la herencia de su padre y de no haberle atendido durante su niñez han abierto una brecha que ni el fallecimiento de la madre de Isabel Pantoja, doña Ana, ha podido cerrar, aunque en un principio pareciera que el dolor había hecho que limaran asperezas.

A pesar de que doña Ana llevaba años enferma, Isabel Pantoja está desolada y ha permanecido durante días en Cantora, su residencia de Medina Sidonia (Cádiz). La triste noticia facilitó, sin embargo, el reencuentro entre la tonadillera y su hijo después de más de un año de distanciamiento.