Anatomía y sabor de tres hamburguesas de 'carne' vegana a la venta en Aragón
Hechas con proteína vegetal procedente de la soja o el guisante, algunas de las propuestas llegan a convencer de que se trata de un bocado de ternera.
Javi y Sara hacían fila este viernes, a mediodía, justo delante de quien firma este reportaje. Podría parecer que lo hicieran a conciencia o que formasen parte de una licencia creativa, pero ahí estaban: él, rastas largas y estética alternativa; ella, melena rubia recogida en un gran moño y una bolsa de tela blanca al hombro sobre la que se leían dos palabras: ‘Go Vegan’ (hazte vegano). Una situación de primero de Paradoja si se tiene en cuenta que frente a ellos esperaba, sonriente pese a las horas de trabajo acumuladas, una dependienta del Burger King del centro de Zaragoza.
La pareja se llevó a casa, "para probar qué tal saben" y no sin antes preguntar dos veces si la comanda se había despachado de forma correcta, dos hamburguesas de carne. De carne vegana. La multinacional estadounidense anunció esta semana a bombo y platillo el lanzamiento de su propia versión de un producto que va a luchar por hacerse hueco en las cadenas y restaurantes, pero al que todavía le queda mucho recorrido. Grandes compañías y conglomerados -algunos, como Beyond Meat, incluso cotizan en bolsa- están detrás de los filetes rusos fabricados a partir de diferentes proteínas de origen vegetal, cereales y otros condimentos que respetan las dietas alternativas. Era una reclamación constante de la creciente comunidad vegana y al menos tres de las marcas que más hamburguesas venden en España ya las han puesto a disposición del público, con resultado dispar. Cuatro particulares hemos probado y puntuado las tres que se pueden probar en Zaragoza, y estas son las valoraciones medias de los cuatro…
Goiko Grill
Los restaurantes de Goiko Grill son considerados templos para los amantes de las hamburguesas. La marca de la casa reside en el tamaño, la calidad de la carne y la posibilidad de elegir entre decenas de aderezos para configurar el menú perfecto. Su opción vegana, disponible desde hace unos meses y sustentada por la productora ‘Beyond Meat’, choca bastante. La pedimos acompañada de guacamole con chipotle. Su sabor no es para nada malo (promedió 6,25 puntos), aunque el primer bocado no arroja el gusto que uno espera de una hamburguesa. El parámetro que menos puntuación obtuvo (4) fue la textura, ya que no recordaba al tradicional. Obtuvo un aprobado raspado (5) en apariencia, si bien hay que tener en cuenta que los platos de la cadena destacan por ser de una calidad superior a la media.
¿Qué llevan? Según explica la compañía, están hechas a partir de legumbres y 20 gramos de diferentes proteínas vegetales, especialmente del guisante. Tienen la mitad de la grasa saturada de una hamburguesa de ternera tradicional.
Precio: 10,90 euros (incluye patatas)
The Good Burger
Comparte proveedor con los restaurantes de Goiko, pero lo cierto es que sus emparedados de ‘Vegan Burger’ (variante de la misma marca) están más conseguidos. Todos los participantes en la cata coincidieron en que la propuesta del TGB era la que más se parecía a una hamburguesa de ternera, llegando incluso a opinar que dan el pego como una de ellas. Arrasó a nivel de sabor, textura y apariencia (8,75 puntos sobre diez en los tres casos).
¿Qué llevan? Los ingredientes coinciden con los de Goiko, aunque la presentación es más compacta. En ambos casos coinciden la ausencia de gluten y transgénicos.
Precio: 5,90 euros
Burger King
La última en llegar al mercado. Su proveedor es la firma holandesa The vegetarian butcher. El ‘Rebel Whopper’ es el único que suspende la asignatura del sabor (4,25 de media). La consistencia y firmeza de la carne es similar a la de su versión carnívora y todos los catadores coincidieron en que sí, que daba el pego por una hamburguesa tradicional de la cadena. Obtuvo una media de seis puntos en cuanto a apariencia.
¿Qué llevan? La propuesta de la famosa compañía está hecha a partir de ingredientes como la soja, trigo, hierbas aromáticas similares a las empleadas con los cortes de carne habituales, cebolla y guisantes, además de aceite vegetal.
Precio: 4,46 euros
De la carne vegana a la de cultivo
Uno de los grandes retos de la industria alimentaria es satisfacer la creciente demanda de alimentos de una población mundial que no deja de crecer. Para ello harán falta nuevas fórmulas que puedan trabajar a gran escala y que, a la vez, sean sostenibles y no perjudiquen el medio ambiente. Una de las líneas abiertas es la carne ‘falsa’ o de laboratorio.
La aragonesa Aldelís (antes Casa Matachín) ha decidido entrar en el accionariado de la compañía especializada Biotech Foods, sumando así una nueva línea de investigación centrada en la ‘carne de cultivo’. El proceso por el que se obtiene se denomina agricultura celular y consiste, esencialmente, en obtener células musculares del animal, extraídas previamente y sin dolor de su cuerpo. Este, una vez finalizada la extracción, vuelve a su lugar en la granja.
La carne cultivada no busca sustituir a la tradicional, sino convertirse en una alternativa más de proteína de alto valor biológico, que garantice el aporte nutricional adecuado. Según las Naciones Unidas, en el año 2050 la demanda mundial de carne se incrementará en un 76%, lo que implica una imposibilidad de satisfacerla con la producción actual de carne. En este contexto, la carne cultivada se presenta como una de las soluciones mejor valoradas y factibles para cubrir esta demanda. No requiere sacrificio animal y es más sostenible al necesitar un 98% menos de superficie (tierra) para su producción, reducir entre un 80 y un 95 % las emisiones de carbono a la atmósfera y disminuir entre un 82-96% el consumo de agua requerido.
