La potencia del presente y el costumbrismo dominan entre los 10 finalistas del Planeta

En total fueron 486 las obras originales presentadas este año al concurso mejor dotado de las letras hispanas.

El presidente del Grupo Planeta junto al resto del jurado durante la presentación del Premio Planeta.
El presidente del Grupo Planeta junto al resto del jurado durante la presentación del Premio Planeta.
Alberto Estévez

El presente y cierto costumbrismo domina entre las diez novelas finalistas que optan al 64 Premio Planeta del total de 486 obras originales presentadas este año al concurso mejor dotado de las letras hispanas.


El editor del grupo, Emili Rosales, ha explicado que entre las obras presentadas llama la atención, desde un punto de vista narrativo, "la potencia del presente y de la realidad o de un pasado muy próximo".


Según el editor, "esta realidad tan cambiante en la que nos movemos da de sí para narrar todo tipo de historias, con personajes sometidos a situaciones extremas, que narran el pasado familiar, cuentan una sociedad o un conflicto, investigan un crimen o nos cuentan cómo se ha perpetrado". Rosales ha subrayado la calidad de los originales presentados y entre ellos ha puesto especial énfasis en "dos grandes novelas" entre las diez finalistas.


En nombre del jurado, el escritor Juan Eslava Galán ha ido desgranando algunas de las características de cada una de las diez novelas finalistas, de las cuales sólo tres se presentan a cara descubierta: Margarita García Gallardo, Juan Burgos Baruel y Blanca Bravo, mientras que los demás se ocultan tras seudónimos.


Los tratamientos literarios y los géneros empleados son variados, desde una novela con siete narradores como "Sociedad Literaria Tolbooth", de García Gallardo, con resonancias de Conan Doyle, Poe y Agatha Christie.


O el costumbrismo de "Nubes de tormenta", con la relación entre un profesor de literatura en paro y una empresaria separada; un retrato de la Valencia actual en "La librería Vidal"; una novela histórica de intriga en torno al Lazarillo de Tormes en "La otra vida" o una historia de iniciación en "Pijama Party".


El género negro está presente además en "Trece meses desde mayo", con una mujer que investiga la muerte en un accidente de tráfico de su marido en una carretera en la que no estaba previsto que debía estar; en "El baile de San Vito", con unos accidentes extraños en un pequeño pueblo de Castilla tras la llegada de un inglés pelirrojo; o en "El ladrón de sueños", con aromas de Agatha Christie y un tono gótico-hispánico, ha resumido Eslava Galán.


Como es habitual, entre los periodistas han circulado algunos nombres en las quinielas de posibles ganadores del premio, autores como Luis Mateo Díez, Ildefonso Falcones, Sergio Vila-Sanjuán o periodistas como Susanna Griso o Cristina Pedroche. El jurado no ha querido valorar estos nombres, pero Eslava Galán ha asegurado que Javier Sierra, "un nombre que ya se especuló el año pasado, es amigo mío y hoy me lo he encontrado en el hotel y me ha jurado que no es (el ganador), pero yo no lo juraría", ha dejado caer en un tono misterioso. 

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