La sonda de la nave Rosetta envía su primera imagen en su descenso al cometa 67P

La ESA tiene todo preparado para el histórico aterrizaje, que se llevará a cabo este miércoles.

La ESA ha hecho pública la primera foto enviada por la sonda Philae.
La sonda de la nave Rosetta envía su primera imagen en su descenso al cometa 67P
ESA



La ESA ha hecho pública la primera foto enviada por la sonda Philae. Se trata de una imagen captada a los 15 segundos de su separación de la nave Rosetta, en su primer 'paso' en el viaje hacia el cometa 67P/Churyúmov-Gerasimenko, sobre el que, previsiblemente aterrizará a las 17.00 (hora peninsular española).


La misión va cumpliendo todos los pasos que había previsto la Agencia Espacial Europea (ESA). La confirmación de su separación llegó con puntualidad, a las 10.06, un par de horas Philae envió su primera señal a la Tierra, a través de Rosetta, y poco después llegarían las primeras imágenes.


Estos últimos pasos son resultado de los exámenes de instrumentos que la sonda realiza durante su descenso al cometa. El científico de la misión, Miguel Pérez de Ayúcar, ha indicado que en el trayecto que le separa de la roca también se pone a prueba el magnetómetro, encargado de determinar la orientación y la estructura magnética de la superficie. También comienza a funcionar el instrumento llamado CONSERT, que determinará la gravimetría del cuerpo.


La sonda europea Rosetta lanzó el módulo Philae sobre el cometa 67/P Churyumov-Gerasimenko, a una distancia todavía de 22 kilómetros y en el que aterrizará unas siete horas después para estudiar su composición.


La Agencia Espacial Europea (ESA) informó desde su centro de control de operaciones en la ciudad alemana de Darmstadt de que la separación del módulo Philae se produjo a las 09.03 horas GMT.


Es la primera vez en la historia que una nave está tan cerca de un cometa. 


Matt Taylor, científico del proyecto, ha explicado que los últimos análisis de la zona de aterrizaje indican que es un poco más caliente de lo que se pensaba inicialmente. "Estamos analizando los datos de varios instrumentos; se trata de un material de superficie más polvorienta a medio camino entre la nieve dura y la ceniza de cigarrillo; hay variaciones, pero estamos viendo esto a través del sitio de aterrizaje previsto", explica.


El aterrizaje será confirmado con la recepción de señales de telemetría que indicarán que se ha tocado la superficie y que los arpones de anclaje han sido lanzados. Agrega que tomará varios minutos analizar la telemetría módulo de aterrizaje para confirmar el aterrizaje. Un posible problema podría ser que Philae haya aterrizado, pero que los arpones no hayan anclado. El equipo de operaciones no ha detectado actividad en la zona del cometa designada para el aterrizaje que pueda amenazar la misión, aunque si se produjera habría que decidir un aplazamiento, informa la ESA en el blog de la misión.


El punto de aterrizaje, bautizado Agilkia, tiene un kilómetro cuadrado y está situado cerca de una depresión llena de rocas que caracteriza al más pequeño de los dos lóbulos del cometa.

Se trata de una de las áreas con terreno menos accidentado de entre todas las opciones consideradas durante el proceso de selección del lugar idóneo.


La mayor parte de la superficie del cometa está cubierta de rocas -algunas del tamaño de una casa- y de pronunciadas pendientes, fosas profundas y grandes acantilados.


El módulo cuenta con una autonomía propia de unos dos días y medio, tras los cuales su supervivencia estará ligada a la capacidad de recarga de sus paneles solares, dependiente de que no queden manchados por el polvo que desprende el cometa.


Rosetta, lanzada en 2004, tiene como misión estudiar por vez primera la superficie de un cometa, que los científicos consideran constituido por un material más primitivo que el de los planetas, con la esperanza de que eso aclare algunos misterios sobre la formación del Universo.