El buen tiempo marca el inicio de la Pasión en la Semana Santa de Zaragoza
Las 24 cofradías procesionaron hasta el Pilar, donde Julián Ruiz Martorell leyó el pregón.
Como cada año, el pregón de Semana Santa dio entrada a la festividad en la capital aragonesa. Miles de personas se reunieron para escuchar las palabras del obispo de Huesca y Jaca, Julián Ruiz Martorell, que con su pregón daba inicio a los días más importantes para los más de 15.000 cofrades de la Semana Santa zaragozana. Este año celebra su reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Internacional.
La climatología acompañó durante toda la jornada y el sol alumbraba los relucientes estandartes que portaban los representantes de cada una de las 24 cofradías. La procesión previa al pregón, que comenzó sobre las 18.00 en la Iglesia de San Cayetano, en la Plaza del Justicia, aglutinó a cientos de devotos en los alrededores del templo que admiraban emocionados el primer retumbar de los tambores.
El recorrido siguió por la calle Manifestación, Alfonso I, el Coso, Plaza España y Don Jaime I hasta llegar a la Plaza del Pilar, donde Martorell se encargó de recitar un pregón cargado de emoción y acompañado de un riguroso silencio por parte de los asistentes.
En su discurso, que finalizó pasadas las 20.30, recordó alos más desfavorecidos y subrayó la importancia de todos y cada uno de los días que componen la Semana Santa. Además tuvo palabras de ánimo a Monserrat Caballé, a la que un accidente doméstico impidió ser la pregonera de este año. El obispo le deseó "una pronta recuperación".
Centrado en los actos de los próximos días, Ruíz Martorell quiso destacar que "Zaragoza aborda la devoción de un pueblo perenigrante". Y recalcó la importancia de la esencia de las procesiones y celebraciones de estos días: "Es normal que ahora estemos inquietos por el cómo, por cuidar cada detalle por pequeño que sea, sin embargo debe preocuparnos el por qué celebramos la Semana Santa", dijo.
Expectación en las calles
Miles de personas acompañaron a la procesión durante todo su recorrido. Gente de todas las edades se acercaron a diferentes puntos del centro de la ciudad para observar la marcha o hacer fotografías.
Los más pequeños, que también disfrutaron de la tarde, contemplaban entusiasmados el elegante andar de los caballos policiales que comandaban la marcha, mientras algunos de los más veteranos no podían evitar emocionarse al paso de las cofradías. El fervor y el respeto más profundo acompañaron a los cofrades hasta su regreso a la Iglesia de San Cayetano.
El inicio de la Pasión
Para los miembros de las cofradías, el pregón significa el inicio de sus días grandes. Así lo afirmaba Guillermo Maisterra, perteneciente a la Cofradía del Descendimiento de la Cruz y las Lágrimas de Nuestra Señora: "Llevamos meses de duro trabajo preparándonos para la Semana Santa, así que esto es ilusionante". Maisterra aseguraba este sábado que para él estas fechas son "la representación de un sentimiento y un ejercicio manifiesto de fe pública".
Hasta el Domingo de Resurreción hay previstas 53 procesiones en Zaragoza.
