Domingo de Ramos

El sentimiento está en la calle

Las calles de Zaragoza se han llenado de color, ritmo y pasión con siete procesiones a lo largo de la tarde del domingo.

Procesión del Dolor de la Madre de Dios
El sentimiento está en la calle
HERALDO.ES

Ya se puede decir, sin tapujos, que ha llegado la Semana Santa. Ya está aquí, en Zaragoza, en toda su plenitud. Tras los actos que han tenido lugar a lo largo del fin de semana -pregón inicial y procesión del paso de la Entrada-, la tarde del Domingo de Ramos ha alimentado, al fin, los anhelos de los cofrades y de los simpatizantes en general, quienes llevaban un año esperando estas fechas tan especiales.


A primera hora de la tarde, el Coso Bajo se ha llenado de creyentes y curiosos para observar la estación de penitencia de la Humildad, hermandad que conjuga el aire de la Pasión andaluza y la identidad cultural de la capital aragonesa. El espectáculo configurado en las callejuelas del entorno del convento de Santa Mónica ha dejado a más de uno con un nudo en la garganta y unos ojos con un brillo más que delatador.


Los asistentes, que han abarrotado la calle del Doctor Palomar, no se han cansado de aplaudir a los costaleros, mientras estos portaban los pasos. En una estampa que rozaba lo bíblico, cientos de pétalos caían desde el cielo.


A unos metros, partiendo del colegio Pompiliano, la procesión del Dolor de la Madre de Dios ha corrido a cargo del Prendimiento del Señor. Un acto con marcado carácter aragonés en el que la Jota ha tomado la palabra. El paseo de Sagasta, lleno hasta la bandera, ha sido el eje central de este paso.


El tiempo, igual que a lo largo del sábado, ha sido inmejorable.