El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha avanzado las líneas de su propuesta de reforma laboral que concretará las próximas semanas y que se fundamenta en reducir notablemente los tipos de contrato, declarar la "guerra" a la precariedad laboral y primar la negociación colectiva.

En Salamanca, Sánchez ha asegurado que, si gana las elecciones, derogará la reforma laboral del PP y aprobará "un nuevo estatuto de los trabajadores, que recupere la negociación colectiva".

Aunque hasta dentro de unas semanas no concretará su reforma laboral, el dirigente socialista ha explicado que debe ahondar en la idea de que haya "menos desigualdad y sueldos más dignos".

Por otra parte, sobre su reforma fiscal, ha explicado que será de "izquierdas", que tendrá la línea roja de "no subir ni un euro de impuestos a la clase media" y que se harán modificaciones en el "IRPF para que tributen más los grandes patrimonios que ahora lo eluden".