Tercer Milenio

En colaboración con ITA

Tres retos por cumplir frente a la enfermedad

En Aragón, la AECC destinó 350.000 euros a proyectos de investigación oncológica en 2015. El gran reto es alcanzar, con el apoyo de la sociedad, los 20 millones de euros anuales para esta causa en 2020.

Una imagen de los protagonistas de la II Marcha contra el Cáncer, celebrada el pasado mes de junio en Zaragoza, junto al gerente de la AECC, Patxi García (i).
Una imagen de los protagonistas de la II Marcha contra el Cáncer, celebrada el pasado mes de junio en Zaragoza, junto al gerente de la AECC, Patxi García (i).
Laura Uranga

"España es un país generoso. Cada día batimos un nuevo récord de donantes de órganos, pero a la hora de apoyar otras causas, nos falta algo de espíritu filantrópico". Lo dice el investigador Alberto Jiménez, quien reconoce que en los últimos años, pese al esfuerzo de organizaciones como la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), la investigación oncológica ha sufrido también el duro embiste de la crisis


"La administración debe entender que la investigación es una inversión y no un gasto, y dotarla de fondos. En ningún caso debe eludir su responsabilidad", subraya este científico aragonés, para quien la financiación privada debe ser un "complemento" en estos años de 'sangría' económica y de recortes. A su juicio, la labor de oenegés como la AECC ha servido de "torniquete" para evitar la muerte de muchos laboratorios, pero "no ha sido una curación", ya que muchos han quedado "tocados" por la falta de ayudas.


1. Primer gran reto: que el tren de la investigación no pare

Conseguir que aumente la financiación privada y de donaciones para la investigación oncológica es uno de los principales retos que persiguen también desde la AECC, una organización sin ánimo de lucro que cada año destina en torno a siete millones de euros para proyectos de investigación oncológica. "Queremos que en 2020 el presupuesto anual que se dedique a estos proyectos alcance los 20 millones de euros", afirma Patxi García. El gerente de la Asociación Española contra el Cáncer en Zaragoza recuerda que eso "solo se conseguirá con el apoyo y la implicación de toda la sociedad civil", en un momento en el que la financiación privada y las donaciones en España se sitúan muy por debajo de las cuantías que se dedican para fines sociales en los países anglosajones. "Si te va bien en la vida, le devuelves algo a la sociedad. Siempre pensamos en Amancio Ortega, pero muchos otros podemos donar más. Un matrimonio de un ingeniero y un médico puede destinar fácilmente 2.000 euros al año a investigar contra el sida, el alzhéimer o el cáncer y/o apoyar el 'ballet' o a un museo de barrio. Pero estos solo dan unas monedas en una colecta", critica Jiménez. "Si no somos capaces de implicar a los ciudadanos y a las empresas, no conseguiremos recaudar todo ese dinero que es absolutamente necesario para avanzar en la lucha contra el cáncer", sentencia, por su parte, el gerente de la AECC.


El investigador Alberto Jiménez reconoce también que la financiación pública debe ser "continuada y estable" para que estos proyectos salgan adelante y no se vean afectados por la falta de convocatorias y de ayudas públicas. "Estamos convirtiendo nuestros AVEs (sic) de investigación en metros, acelerando y frenando todo el tiempo... No conviene parar el tren de la investigación; arrancar es caro, pero una vez que coge velocidad, el consumo baja y da réditos", defiende este joven investigador, que se siente "un privilegiado por seguir vivo en esto".


2. Cubrir la carencia existente en cuidados paliativos y llegar al 100% del cribado poblacional en cáncer colorrectal

Otra de las carencias más importantes que existen en la lucha contra la enfermedad se da en cuidados paliativos. "Desgraciadamente, hoy en día no todos los ciudadanos tienen acceso a ellos en los últimos momentos de la enfermedad, y eso es una carencia muy importante de nuestro sistema", reconoce García. En Aragón, según datos de la AECC, uno de cada dos pacientes que necesitan cuidados paliativos no tiene acceso a ellos. "El plan estratégico de cuidados paliativos en la Comunidad está vencido. Y ese es el gran reto que tenemos para atender estas necesidades", advierte García, quien asegura que las unidades especializadas siguen siendo las mismas que hace un año, cuando lo deseable sería que aumentaran tanto el número de unidades móviles (ESAD), como las camas o unidades de paliativos en hospitales. "Son servicios que deberían mejorarse no solo cuantitativamente, sino también en lo que respecta a la esfera psicosocial del paciente, incorporando -además de médicos y enfermeros- la figura del psicólogo, del trabajador social y del voluntario", añade.


En Aragón, en concreto, el esfuerzo para lograr mejorar en este tipo de asistencia sanitaria es doble, ya que según advierten desde la Asociación Española contra el Cáncer existe, además, una gran carencia en cuidados paliativos pediátricos que merece ser atendida. "Si bien es verdad que afecta a muy poquitos niños, porque son en torno a 30 o 40 nuevos casos al año, en Aragón es una necesidad que los propios profesionales de la oncología pediátrica nos lo transmiten a diario, ya que no es lo mismo atender a un niño que a un adulto con cáncer", subraya García.


La crisis ha hecho mella también en la aplicación de algunos programas asistenciales, como en el cribado poblacional para la detección del cáncer de colon, cuyo objetivo es llegar al 100% de la población diana en los próximos años. "Desde la AECC tenemos el deber de recordárselo a la Administración constantemente para que su aplicación sea una realidad en todas las comunidades", puntualizan.


3. Incluir al voluntariado como parte de la atención a los pacientes oncológicos y a sus familias

Otro de los grandes retos que quedan pendientes en la lucha contra el cáncer pasa por mejorar la atención psicosocial a los pacientes oncológicos y a sus familias. "La sanidad pública a este nivel no ha dado todos los pasos que nos gustaría. Ha habido recortes presupuestarios públicos importantes, pero estoy convencido de que esta atención formará parte de la cartera sanitaria elemental en la atención a los pacientes oncológicos y a sus familias", confiesa García.


A juicio del gerente de la AECC en Zaragoza, esta mejoría asistencial debe lograrse con la colaboración del voluntariado. "Hay muchas necesidades que no son sanitarias ni psicológicas, sino que atañen a la esfera socialLos voluntarios pueden desarrollar una gran labor de acompañamiento en este sentido desde el diagnóstico de la enfermedad de un paciente, a la superación de la enfermedad o en sus últimos momentos de vida", destacan desde esta asociación zaragozana.


De esta forma, y a pesar de los avances conseguidos en los últimos años, profesionales y pacientes coinciden en la importancia de seguir sumando apoyos en la lucha contra el cáncer. "Esto es algo absolutamente necesario para ganarle la batalla a la enfermedad. Todos sabemos que se están consiguiendo grandes logros, pero esta es una maquinaria que no debe parar, que debe ir cada vez a más", concluye García.


Ir al suplemento de salud.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión