Adjunto a la Dirección de HERALDO DE ARAGÓN

El broche de oro

Unas buenas memorias pueden ser el broche de oro para una carrera política.
Unas buenas memorias pueden ser el broche de oro para una carrera política.
Bruno / Pixabay

El señor X sabía que muchos políticos españoles han escrito sus memorias. 

No lo ha hecho Felipe González, pero sí Aznar o Rajoy. También las han rubricado Bono, Margallo o Durán y Lleida. Últimamente, Pedro Sánchez las ha dictado. El señor X también lo iba a intentar. Poner negro sobre blanco su versión de lo acontecido para reivindicarse y ajustar cuentas no sería absolutorio, pero sí balsámico. Además, sería una buena manera de poner punto final a su carrera pública, un brillante broche de oro.

Le pareció buena idea estructurar el libro como un diálogo socrático. Soltero empedernido, misántropo y hombre de pocos amigos, optó por charlar con su viejo perro, Troylo. A su mascota le iría narrando lo que recordaba de su pasado. Acometió la tarea con tanto entusiasmo que en un mes ya tenía redactadas cuatrocientas páginas, aunque solo había llegado a repasar su primera época en la arena política. El libro se vendió muy bien por el eco mediático que logró. De los platós de televisión a las portadas de los periódicos, los simpatizantes le aclamaban en las presentaciones y los actos de promoción.

Como su cánido contertulio no mostraba signos de agotamiento, se puso con la segunda parte. Escribió de forma compulsiva hasta completar el nuevo volumen. El éxito de crítica y público fue tal que el editor le imploró que elaborase una tercera entrega. Cuando llegó la cuarta, Troylo ya había muerto; después, le dedicó la quinta.

Ya ha publicado doce volúmenes. Los mismos que el mismísimo Churchill. No obstante, como los militantes le han rescatado para la política activa, el señor X aún tiene pendiente poner el broche de oro a su carrera... y el punto final a sus memorias.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión