Menores con derechos
El Comité de los Derechos de la Infancia de Naciones Unidas, en las recomendaciones realizadas en 2018, indicó al Gobierno de España que, entre sus principales prioridades para mejorar la atención a la infancia, se debería garantizar en los próximos años una atención adecuada a los niños y niñas migrantes no acompañados.
Sin embargo, en lugar de apoyar este horizonte, hemos asistido a toda una involución política, sin precedentes similares en la reciente historia democrática, donde algún partido mezcla, tan interesada como miserablemente, migración con delincuencia.
Estamos asistiendo a tiempos donde se niegan los más elementales derechos humanos, incluso a las y los menores, simplemente porque son de otro país.
Quienes practican el ‘negacionismo de la solidaridad’ los tenemos en las instituciones aragonesas y, en algunos casos, al frente de ellas. Y esto es motivo de vergüenza para una sociedad democrática y plural como la nuestra.
Estos derechos humanos son universales, inherentes a todas las personas, con independencia de la nacionalidad, género, origen étnico, religión, idioma o cualquier otra condición.
Por este motivo, es necesario que en esta zozobra política tengamos los suficientes puntales de apoyo para avanzar y no renunciar a la consecución de estos compromisos esenciales.
De este modo, debemos destacar, por su excepcionalidad, que en la reciente Comisión de Bienestar Social y Familia, en sesión celebrada el día 12 de marzo de 2024, se acordó, a iniciativa de CHA, reiterar el compromiso de las Cortes de Aragón con los derechos de la infancia, plenamente estipulados en la Convención sobre los Derechos de la Infancia que fue aprobada como tratado internacional de derechos humanos el 20 de noviembre de 1989.
Y no sólo eso, con enmiendas transadas entre distintos partidos representados en las Cortes de Aragón, se pidió al Gobierno seguir reconociendo y garantizando todos los derechos de los y las menores migrantes sin personas adultas de referencia, según dicta el régimen jurídico de extranjería, y de acuerdo con el Estatuto de autonomía de Aragón, con independencia de su nacionalidad.
Así, las Cortes de Aragón también abogaron, ese mismo día, con solo un partido político votando en contra, por solicitar al Gobierno desarrollar la denominada Estrategia Aragonesa de Niños, Niñas y Adolescentes que Migran Solos, para el periodo 2022-2025, con el trabajo coordinado de todas las administraciones públicas implicadas, la Universidad y entidades del tercer sector.
Igualmente, se aprobó en las Cortes, por una amplia mayoría, instar al Gobierno de Aragón a desarrollar diversas campañas institucionales para promover y favorecer su acogimiento en la población aragonesa.
Sin olvidar que se convino, con el voto favorable de hasta cinco partidos políticos distintos, reclamar al Gobierno de Aragón adoptar medidas de apoyo a las personas "dispuestas a acoger a niños y a niñas migrantes, reforzando cuantas acciones institucionales sean necesarias para desarrollar diferentes programas de sensibilización dirigidos a la población tendentes y apoyar la necesaria evaluación adecuada y pautada de las y los menores migrantes durante su estancia en los centros de primera acogida, para ofrecer caminos o itinerarios, enfocados a localizar recursos más especializados o que ayuden y faciliten la integración de los y las menores con otros jóvenes y el propio contexto de la acogida".
Ahora debemos continuar con el reconocimiento legal de los derechos que deben reflejarse en medidas eficaces que trasladen a la sociedad textos normativos con este objetivo: la integración de los menores migrantes no acompañados en Aragón.
Isabel Lasobras Pina es secretaria general de Chunta Aragonesista (CHA) y portavoz en la Comisión de Bienestar Social y Familia de las Cortes de Aragón
