Los nuevos proyectos sanitarios que ya están en marcha en Aragón, las iniciativas que se podrían materializar a medio plazo y distintas propuestas que se estudian para un futuro más lejano contribuirán a ampliar la actual oferta hospitalaria en la Comunidad.

Esta mejora asistencial obliga a contar con los profesionales necesarios, ya de por sí escasos. Las infraestructuras no sirven si no hay personal cualificado para atender a los pacientes.

El anuncio de que la zaragozana Clínica del Pilar va a ser adaptada como hospital especializado en la rehabilitación de ictus es la última de una amplia serie de novedades que se han dado a conocer en los últimos años dentro del sector sociosanitario en Aragón. Mientras sigue avanzando la construcción del hospital de Quironsalud, que será el tercer centro sanitario más grande de Zaragoza por detrás del Miguel Servet y el Clínico Lozano Blesa, también se trabaja para poner en marcha los nuevos hospitales del Salud en Alcañiz y Teruel. En la capital del Ebro se está construyendo ya un complejo sociosanitario en el barrio del AVE. A estos proyectos en ejecución hay que sumar el hospital que proyecta el Grupo Hernán Cortés (HC) en Miralbueno. Se trabaja también en la mejora del Royo Villanova y en poner en marcha una residencia de estancia media para jóvenes con trastorno mental grave.

Esta notable ampliación de la oferta hospitalaria está generando un reto de personal que hay que afrontar cuanto antes. Es imprescindible ampliar el número de jóvenes formados en las distintas áreas y es necesario también mejorar las ofertas laborales. Solo se podrá captar a más médicos, enfermeros y demás profesionales con contratos más estables, mejor remunerados, con garantías para desarrollar una carrera profesional y con disponibilidad de tecnología de última generación.