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Cartas al director de HERALDO: Sacándole punta a la lanza

Sacándole punta a la lanza
Sacándole punta a la lanza
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Sacándole punta a la lanza

Un titular dice: "Aragón, punta de lanza para la soberanía energética de España y la Unión Europea". Punta de lanza es la persona o cosa que representa lo más avanzado de cierta actividad; en primera posición o liderando algo. 

Es asimismo el que abre el camino para que otros puedan caminar en él. En la Biblia la punta de lanza tiene un significado simbólico que se relaciona con el sacrificio, la violencia y la muerte. Lanza castellana, hombre de armas provisto de dos cabalgaduras. Lanza jineta, lanza corta. Lanza porquera, especie de chuzo. Echar lanzas en el mar, coger agua en cesto. Estar con la lanza en ristre, estar dispuesto o preparado para acometer una empresa o contestar resueltamente a alguien. No quedar lanza enhiesta, derrotar enteramente al enemigo. No romper lanzas con nadie, ser enemigo de riñas y contiendas. Quebrar lanzas dos o más personas, reñir o enemistarse (Sánchez-Feijóo). A pesar de que la lanza es una herramienta o arma que nadie usa ya, muchos dicen todavía "rompo una lanza a favor de tal persona". Absurdo. Yo les diría "lanza que no has de romper, déjala correr". Es la lanza una de las armas más antiguas, usada desde la Prehistoria. Los ejemplares de lanza más antiguos de Europa son de hace unos 300.000 años, un conjunto de ocho lanzas de madera encontradas en una turbera en Alemania. Hay varios tipos de lanza y uno de ellos, que coincide con el apellido del actual presidente del Gobierno aragonés, Azcón, es arma arrojadiza, como dardo, que coincide con el término en vascuence. El lanzón, que hemos convertido en un pastel del día de San Jorge, es una lanza corta de punta ancha y fuerte.

Antonio Nadal Pería. ZARAGOZA

El mercadillo del Congreso

Hace unos días murió Javier, un discreto socialista de corazón, un currante sin cargos que no renegó del partido ni en los peores momentos, incluso cuando se llevó palos de los grises o pasó alguna noche en comisaría. Votó al PSOE el 23-J, con los ojos cerrados, en un supremo acto de fe en el partido, no en su líder. Pero cuando vio lo que hacían con su voto, se hundió. Nunca quiso ver España partida en dos, ni en cuatro. No le gustaba que removieran el pasado para dividir a los españoles y todavía menos que cambiaran leyes para soltar a delincuentes. Avergonzado, rompió su carnet del PSOE. Nunca renegó del programa y la ideología socialistas, algo que ya no tiene el partido actual, que es sólo la herramienta para mantener a Sánchez en el poder, a costa de negociar en el parlamento con mercaderes que sólo buscan romper el país en su beneficio. Incluso pensó llamar a algún parlamentario del PSOE en Aragón para que no permitieran la amnistía. Se preguntaba quién va a echar a los mercachifles del Congreso, que existe para legislar y llegar a acuerdos, pero no para comprar y vender votos. Javier, que murió en paz consigo mismo, nunca hubiera dicho esto en público, así que lo hago yo en su nombre, que obviamente es otro.

José Manuel Solá. ZARAGOZA

Loarre en mi pared

Al decir Loarre, su nombre enciende una lámpara de carburo que pone en la mesita de noche de mi mente. Su llama, aunque escueta, es suficiente para iluminar todos los rincones de mi sala de proyecciones… Al decir Loarre, cómodamente sentado en una de mis butacas internas, veo en mi pantalla particular las diapositivas de la iglesia de San Esteban, la ermita de San Isidro, el refugio de Santa Marina, la peña del Sol, el castillo de Marcuello, las ermitas de Marcuello y de San Miguel, el castillo de Marcuello, Linás de Marcuello. Al decir Loarre, por el barranco de Palagás, me dirijo hacia la sierra de Loarre. Arropado por una espesa manta bordada de pinos, quejigos y carrascas, al decir Loarre, veo la Hoya de Huesca, desde Ayerbe hasta Bolea. Al decir Loarre, veo una pista que aposta pasta por una incrustada cresta jugando con los picos. Al decir Loarre, veo el abultado abdomen de los mallos de Riglos, de Agüero y peña Rueba proyectado en una pared de la plaza de España de mi pueblo interior. Al decir Loarre, veo el dedo índice del castillo de Marcuello acusando al cielo de su estado. Al decir Loarre, veo a dos pobres y ancianas ermitas que con la mano extendida le piden limosna al señor del castillo. Al decir Loarre, me veo paseando por las empedradas calles, contemplando la iglesia de Santa Ana de Linás de Marcuello. Y al decir Loarre, sendas mis sandalias sudorosas recorren la senda que lleva al lugar de donde partí.

Venancio Rodríguez Sanz. ZARAGOZA

De caza en el Parlamento

Los cazadores del PP se han cobrado dos piezas menores, el exministro José Luis Ábalos y el exsecretario general de Puertos del Estado Álvaro Sánchez Manzanares (este último con fuego amigo), con la ayuda de algunos cazadores socialistas en el caso de Ábalos, que miraron hacia otro lado mientras iban a por él. Ahora persiguen una pieza mayor, más difícil, la presidenta del Congreso y tercera autoridad del país, Francina Armengol, que se enroca con el apoyo de sus colegas socialistas. Pero el objetivo de estos practicantes de la caza mayor del PP es Pedro Sánchez, al que se la tienen jurada desde que Rajoy, pieza mayor del PP, cayó abatido en la moción de censura de un certero disparo. La corrupción produce un hedor por el que les resulta fácil seguir la pista que dejan piezas menores y mayores. Es el Congreso un gran campo de caza, y entre cazadores anda el juego parlamentario.

Martina Pellejero Cuéllar. ZARAGOZA

Las dos caras de la tecnología

Más del 75% de la población mundial tiene acceso a la red, 3.000 millones de personas poseen un ‘smartphone’ y más de 2.000 millones realizaron al menos una compra por internet en 2023. Son tres datos que demuestran lo lejos que ha llegado la tecnología moderna. Que, bien aplicada, nos ayuda por ejemplo a organizarnos, a aprender o a acortar distancias con amistades o familiares. Sin embargo, la otra cara de la moneda es que podemos inundarnos de información estresante o buscar situaciones en las que estemos en riesgo. También, si reducimos el interés por otras actividades, puede contribuir al sedentarismo. Siendo la tecnología muy importante, no hay que depender exclusivamente de ella, pues lo único que vale es su uso inteligente.

Mar Ramos Navarro. ZARAGOZA

(Puede consultar aquí todas las cartas al director publicadas en HERALDO)

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