Por
  • Editorial

Crispación en las instituciones aragonesas

La entrega del reconocimiento, que se otorga a todos los exalcaldes de Zaragoza, ha salido adelante con los votos de PP, PSOE y ZEC. Vox se ha ido del pleno.
Ayuntamiento de Zaragoza
Toni Galan

La tensión política ha protagonizado este jueves el pleno de las Cortes de Aragón con cruces de acusaciones y descalificaciones, además de intempestivos abandonos de los escaños. Algo semejante ha ocurrido en el Ayuntamiento de Zaragoza a costa del caso Koldo y de la Medalla de Oro al exalcalde Santisteve. 

La creciente crispación que se viene observando en las principales instituciones aragonesas es impropia de una Comunidad que se ha caracterizado desde su origen por el diálogo, la cooperación y el pacto. Nadie debe olvidar que las formas también son fundamentales en una democracia.

Los estériles choques verbales y los bochornosos episodios de excesiva gesticulación en los que participan todos los grupos parlamentarias e incluso la presidenta de las Cortes, que tienen su paralelismo en los grandes ayuntamientos como el de Zaragoza, están deteriorando el clima político en las principales instituciones de Aragón. El populismo que trajeron Podemos, Vox y los independentistas a la política nacional se ha acabado contagiando a todos los partidos y también en el plano autonómico y municipal. El resultado es una acelerada polarización que acaba malgastando mucho tiempo y grandes esfuerzos de la clase política, que organiza absurdas broncas por los asuntos más nimios. Mientras tanto, los ciudadanos asisten atónitos a una espectacularización de la política que margina sus problemas cotidianos, desde la atención sanitaria al acceso a la vivienda por parte de los jóvenes.

Acabar con la crispación política es responsabilidad de todos. Para empezar de los partidos, cuya obligación es decir basta a esta polarización y reconstituir los puentes de diálogo. Su incapacidad para entenderse y alcanzar acuerdos es una anomalía política que pervierte el funcionamiento de la democracia.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión