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Cartas al director de HERALDO: Monet, un paraíso en Madrid

Uno de los cuadros de la serie 'Los nenúfares'
Uno de los cuadros de la serie 'Los nenúfares'
EFE

Monet, un paraíso en Madrid

Al lado de la Cibeles, en el corazón de Madrid y a través de un pasillo inmersivo con una pirotecnia que no chirría, se puede realizar un viaje de la mano del pintor francés Claude Monet al impresionismo. 

Rompe las reglas de la pintura tradicional, saca sus paletas del estudio y las lleva a la naturaleza, transmitiéndonos su impresión de la realidad a través de la luz, la reverberancia del agua o reflejos del cielo. Y a su vez nos aporta esa dimensión íntima, esa experiencia contemplativa, emotiva y mágica. Nos abre su alma. Sus paisajes son solitarios, posesivos y salvo al principio hay pocas muestras de naturaleza humana. La naturaleza siempre es hermosa, pero en Monet resulta cambiante bajo los efectos de la luz y el tiempo. Capta el aire libre (‘au plein air’). No existe para él la memoria sino la reflexión instantánea y la plasma en el momento presente. Se exponen unos 50 cuadros, entre ellos: ‘El tren de la nieve’, ‘La locomotora’, ‘Retrato de Michel Monet con gorro de pompón’, ‘Reflejos del Támesis’, los celebérrimos ‘Nenúfares’, en los que te puedes sumergir en el agua, convertida en espejo. En su última etapa y aquejado de cataratas, sus colores se reducen a marrones, rojos y amarillos y va deambulando en la abstracción con pinceladas de colores, con texturas intrincadamente construidas; a veces parece como si rozase el paroxismo, ya que prescinde de perspectivas o referencias espaciales. La experiencia ha sido única y después de haberla visto me ocurre lo que con algún libro, el ‘Lazarillo de Tormes’; una película, ‘Cinema Paradiso’... sientes la imperiosa necesidad de verla de nuevo y a partir de la fascinación inicial volver al descubrimiento de Claude Monet.

Mariano Aguas Jáuregui. ZARAGOZA

Los tambores del trasvase

Ya suenan tambores de trasvase en lontananza y redoblan con fuerza cada vez más cerca. Lo peor es que los que siempre se han opuesto dependen de los votos de los independentistas para sus objetivos. Y el Ebro está en sus miras. No sobra agua en Aragón ni se han llevado a cabo las obras tantas veces prometidas. Aragón tiene sed y miles de hectáreas de secano siguen esperando, numerosos pueblos precisan del aporte de cisternas, en verano, para su consumo. Da miedo que Aragón esté en medio de disputas ajenas y me temo lo peor. No hace mucho tiempo, las manifestaciones fueron un clamor en contra del trasvase, pero las cesiones a los independentistas no tienen límite. Aragón no debe reblar y ha de defender con uñas y dientes sus derechos porque se juega su futuro.

Joaquín Palacios Latasa. ZARAGOZA

La humilde coma

Cuando leo los periódicos, observo con frecuencia una para mí sorprendente anomalía, que son los desaires que sufre la humilde coma, el más modesto de los signos ortográficos, cuando se ve suprimida en muchas oportunidades en que su empleo es obligado por la RAE, que establece normas al respecto (v. gr., "se pondrá coma delante de las palabras aunque, mas, pero y sin embargo"), y por el buen sentido. Pongo un par de ejemplos extraídos de mi querido HERALDO, no porque se produzcan sólo en este prestigioso diario, sino porque es el único al que estoy suscrito (a nombre de mi esposa) hace muchos años. A saber: "El Ayuntamiento apoya que Trabajo medie en la huelga del bus pero la DGA insiste en el SAMA" (4 de agosto de 2022); "Sánchez inicia el curso con una victoria clave pero no se salva de las críticas" (26 de agosto de 2022). Y el pasado 30 de enero aparecían dos ejemplos de titulares defectuosos, en las páginas 5 (riegos) y 23 (Ucrania). Porque, como agravante, todas estas anomalías aparecen en titulares. Por último, a propósito de la coma, permítanme que mencione la existencia de un libro que dicen que circula por ahí, cuya lectura provoca la muerte por asfixia del lector, al estar redactado todo el volumen sin puntos ni comas… El abajo firmante tuvo el privilegio de hacer el bachillerato en los años cuarenta del siglo pasado en el Instituto de Enseñanza Media ‘Goya’ de Zaragoza, que contaba con un claustro de profesores irrepetible: Blecua, Frutos, Gascón de Gotor, Amador de los Ríos, Moreno Alcañiz, Baratech, Ciriquián, Romaní, etc. Sin comentarios.

Jaime Esaín Escobar. ZARAGOZA

La terapia ocupacional

La terapia ocupacional es aquella profesión socio-sanitaria cuyo objetivo principal es lograr la independencia de la persona. Te acompaña en cada paso que das, por pequeño que parezca, y te enseña a aprender a desaprender. Mediante el uso terapéutico de la actividad consigue cosas tan grandes como poder volver a caminar después de un largo periodo de tiempo sin poder hacerlo o poder comer solo sin ayuda de nadie. Desgraciadamente, en nuestro país es una profesión poco conocida ante la que la gente reacciona con cara de interrogante cuando es nombrada. Recuerda, paso a paso, te acompañamos.

Marta Pinilla Farizo. HUESCA

Papá, ¿por qué somos de Aspanoa?

Mi hijo me hace preguntas como: «Nosotros seremos siempre de Aspanoa, ¿no, papá?». «Por supuesto, hijo». Lo tiene tan interiorizado que lo expresa como si fuésemos de un equipo de fútbol, pero en realidad es mucho más que eso. Desde el primer momento que entras en la tercera planta del Hospital Infantil, la maquinaria de esta asociación y el resto de los trabajadores de Oncopediatría empiezan a trabajar, te rescatan despacito con sumo cuidado para sacar lo mejor de ti y comenzar a recomponer el puzle en que ha quedado tu ser. Ni que decir tiene, con el trato que recibe tu hijo, aunque esté muy lejos de su casa, parece que no lo haya notado en exceso. Conforme pasan los días, disfrutas escuchando las risas de los más pequeños, las muestras de cariño de papás en tu misma situación y te das cuenta de que Aspanoa no eres tú, somos todos los aragoneses que con sus pequeños detalles hacen la vida un poco más fácil a nuestros niños. Mañana es 15 de febrero, en el Día Internacional del Niño con Cáncer tenemos que insistir que el futuro es la inversión en investigación, es la mejora en la medicina para que sea más personalizada, es el apoyo incondicional a nuestros sanitarios. Por todo esto, es el momento para recordar que la rueda sigue girando y no podemos parar de seguir ayudando a esas familias porque todos somos un trocito de Aspanoa. Por todos, por ellos, siempre fuertes.

Carlos del Real Roca

ZARAGOZA

Las cartas al director no deben exceder de 20 líneas (1.500 caracteres) y han de incluir la identificación completa del autor (nombre, apellidos, DNI, dirección y teléfono). HERALDO se reserva el derecho de extractarlas y publicarlas debidamente firmadas. 

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