Subidas de precios

Los españoles y los aragoneses, como ciudadanos y como consumidores, notarán el cambio de año en sus economías familiares. Habrá subidas de precios y de tasas, en un escenario en el que la inflación no está todavía controlada y en el que el Gobierno central comienza a desmontar las medidas anticrisis. En Aragón, la compensación estará en las rebajas fiscales aprobadas por el nuevo Ejecutivo autonómico en los impuestos sobre la renta, de sucesiones y de patrimonio. Pero en todo caso, la cuesta de enero será perceptible

Aunque se espera que el IPC cierre el año en el 3,1%, muy por debajo del 10,8% que alcanzó en julio de 2022, todavía no se puede decir que la inflación esté completamente controlada y en todo caso las subidas acumuladas de productos básicos, como los alimentos, en general se mantienen. Con el nuevo año subirán tasas como la de las autopistas, las ITV, la telefonía, el precio del transporte urbano o las cotizaciones a la Seguridad Social, que repercutirán en el bolsillo de los aragoneses. Con la retirada progresiva de las medidas para paliar los efectos de la inflación, habrá también subidas en los impuestos de la electricidad y del gas; aunque sí continuará aplicándose la reducción del IVA para algunos alimentos, además de las subvenciones al transporte público. Además, muchos hogares tienen que hacer frente a hipotecas cuyo coste se ha disparado en los dos últimos años debido a la subida de los tipos de interés, si bien el euribor, aunque lentamente, comienza a descender. Por el lado de la presión fiscal, el aspecto que en Aragón tendrá una mayor repercusión en favor de las economías domésticas será la deflactación de un 5% en la tarifa autonómica del IRPF para rentas inferiores a 50.000 euros. Es habitual que después de los gastos navideños las familias afronten en enero la necesidad de contener el consumo y las subidas de precios que suelen producirse al comenzar el año lo hacen aún más necesario.