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Cartas al director de HERALDO: 'La glorieta de Ramón Borobia Cetina'

PARQUE GRANDE JOSE ANTONIO LABORDETA DE ZARAGOZA / 21-02-2021 / FOTOS: FRANCISCO JIMENEZ[[[FOTOGRAFOS]]]
'La glorieta de Ramón Borobia Cetina'
Francisco Jiménez

La glorieta de Ramón Borobia Cetina

Paseando por el Parque Grande José Antonio Labordeta, me encuentro con la grata sorpresa de ver obras en el entorno de la glorieta del quiosco de la música. Siento con emoción que, esta vez sí, se tendrá en cuenta la inclusión del nombre del músico zaragozano –mi abuelo– D. Ramón Borobia Cetina, a quien esta dedicada dicha glorieta. Espero impaciente.

José Manuel Laborda Borobia. ZARAGOZA

Vacuna para síndrome de Down

Estamos viendo cómo van ampliando para la vacunación los rangos de edad en función de la disponibilidad de vacunas. En su día dijeron que iban a vacunar a las personas con síndrome de Down a partir de los 40 años, sin que hasta la fecha hayan ampliado este margen de edad, aunque me consta que algunos centros de salud se están saltando el protocolo vacunando por debajo de esta edad. Siendo que en algunos casos los discapacitados intelectuales tienen asociadas otras patologías, la dificultad para cumplir la medidas de seguridad fuera del ambiente familiar (talleres ocupacionales) y su complejidad en caso de contagio y posterior ingreso, ruego a la consejera de Sanidad que estudie ir ampliando el margen de edad de este colectivo, como con el resto de la población.

José Luis Blasco Cardiel. ZARAGOZA

Ayuda solidaria

La gran mayoría de las personas que formamos parte de las Comunidades Cristianas Populares somos socias y, en muchos casos, voluntarias de ONGD, es decir, de organizaciones que trabajan en el campo de la solidaridad y la cooperación para conseguir un mundo más justo e igualitario. El conjunto de las ONGD de Aragón llevan a cabo tareas en común gracias a la existencia de la Federación Aragonesa de Solidaridad, la FAS. Así su repercusión social se amplifica enormemente en nuestra tierra. Cuando en los presupuestos municipales para el año 2021 de Zaragoza, también en los de la ciudad de Huesca, se han producido drásticos recortes en los fondos destinados a la cooperación, nos parece que se está generando un claro retroceso en un compromiso que nos enorgullecía. No es que la ayuda solidaria sea la panacea frente a soluciones y decisiones económicas, comerciales y políticas, que generan pobreza y desigualdad, pero esos fondos municipales, dinero de toda la ciudadanía, permiten visibilizar la interdependencia de las relaciones Norte/Sur. La pandemia de la covid ha acentuado las desigualdades del mundo y también al interior de nuestra sociedad. Atender a las crisis cercanas provocadas por el virus no puede ser la coartada para reducir la ayuda a porcentajes por debajo del 0,29% en Zaragoza (con un 0,53% en 2010), o del 0,16% en Huesca (con un 0,34% en 2017). Ya eran cifras mínimas que ahora se convierten en insignificantes. Y no es tanto el monto de esos porcentajes (en eso lamentablemente les supera ampliamente a la baja el Gobierno de Aragón, con un 0,08%, aunque en recuperación) sino la tendencia a ir disminuyendo –¿hasta acabar, como algún partido pretende?– con la cooperación aragonesa. Desde las Comunidades Cristianas Populares seguiremos apoyando el trabajo de las ONGD y de la FAS, creemos que es imprescindible y continuaremos exigiendo que se cumplan los pactos por la cooperación suscritos por los partidos políticos en 2019. Así como alcanzar el mandato de la ONU, recogido en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, sobre destinar el 0,7% del PIB a la ayuda solidaria.

M.ª Teresa Polo de Marcos (en representación de las CCPS Zaragoza) ZARAGOZA

Inmuno... deprimidos

Se considera grupo de riesgo, desde el punto de vista sanitario, a aquel colectivo de personas que, debido a diversas características biológicas, físicas o sociales, tienen mayor probabilidad de contraer enfermedades. A menudo esas características biológicas vienen determinadas por el padecimiento de determinadas patologías que nos han obligado a luchar a brazo partido para ganar el presente y un posible futuro incierto. En esta situación de pandemia, la fragilidad física en la que nos ha dejado la enfermedad nos ha obligado a permanecer más tiempo en la trinchera del confinamiento y vivir en nuestra burbuja individual. Como colectivo, hemos desaparecido del interés público naufragando en el maremágnun de marcas de vacunas, franjas de edades, aperturas y cierres de límites territoriales. Ni tan siquiera se escuchan las voces de las asociaciones que, supuestamente, defienden nuestros intereses. No aspiro a que nos pongan ni delante ni detrás de nadie. Solo a que nos pongan, claramente, en el calendario de vacunación para que, además de estar inmunodeprimidos, o por estarlo, no caigamos enfermos.

Ana Cristina Fraile García. CUARTE DE HUERVA (Zaragoza)

Las dos almas del partido naranja

Las encuestas hablan de un nutrido número de electores que vamos a abandonar nuestra tradicional fidelidad hacia alguno de los grandes partidos. Hay motivos. Yo no recuerdo tantos incumplimientos, ocurrencias, simplezas, derivas improcedentes, contradicciones al minuto, alianzas inconfesables... En esta situación, para tranquilizar la conciencia, una solución sería fijarse en partidos que huyan de oportunismos, de comportamientos y proclamas de signo rompedor y extremista. Estoy hablando de los que defienden principios como la moderación, la cordura y la templanza. Pero como este género escasea, nos quedamos con lo que hay: Ciudadanos. Un partido que nació con voluntad de centro y por tanto alejado de las algarabías y la confrontación. Pero con Rivera se escoró hacia la derecha, recibiendo bastantes votos de los desencantados del Partido Popular, en horas bajas por sus continuas citas en los juzgados. De esta manera Ciudadanos se convirtió casi en una filial del PP, alejándose de sus orígenes. Creció deprisa pero cayó aceleradamente. Y ahora se ha demostrado que en el partido coinciden dos almas. Una, de puro centro, con partidarios de la geometría variable y por tanto defensores de alianzas con la derecha o la izquierda, según confianza y propuestas; y la otra, partidaria de lealtades inquebrantables al PP. Y así, al primer intento de cambiar de rumbo, en Murcia, aunque hubiera motivos, estalló la división con abandonos y tránsfugas. Y con algún caso espérpentico como el de Toni Cantó, que teatraliza sus cambios de chaqueta con ruidosa traca. Una lástima, porque Inés Arrimadas es una dirigente muy válida, curtida en mil batallas en el asfixiante Parlament catalán, rodeada de fanáticos independentistas que ningunean sin ningún reparo a todos los demás. Suerte, Inés

José Luis Cabez Marco. ZARAGOZA

Las cartas al director no deben exceder de 20 líneas (1.500 caracteres) y han de incluir la identificación completa del autor (nombre, apellidos, DNI, dirección y teléfono). HERALDO se reserva el derecho de extractarlas y publicarlas debidamente firmadas.

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