Reactivación económica
Ibercaja rebaja la previsión económica de Aragón para 2021 por el rebrote de la pandemia desde julio y la consiguiente necesidad de endurecer las restricciones de actividad y de movimientos. No obstante, estima que la caída ya ha tocado suelo y ha comenzado el periodo de recuperación. Hay que trabajar con confianza de cara al futuro inmediato porque la Comunidad cuenta con una buena estructura productiva, más abierta y competitiva que la media española, con un mayor peso de la industria y la agroalimentación, y una menor dependencia del turismo extranjero. De hecho, la economía aragonesa se ha visto menos afectada que la media española en esta crisis por su composición sectorial y por el buen comportamiento de exportaciones y servicios en el tercer trimestre.
El análisis de coyuntura de Ibercaja se mantienen las previsiones realizadas para este año, en el que se prevé una caída del 10,3% del PIB en Aragón, inferior al descenso del 11,4% que se estima para España. El inicio de 2021 tampoco se presenta fácil. En consecuencia, las autoridades aragonesas, como las españolas y europeas, deben estar preparadas para un escenario adverso. Sin embargo, la entidad financiera mejora sus expectativas para 2022 y considera que será entonces cuando la economía vuelva a recuperar los niveles anteriores a la crisis sanitaria. Con el sustancial respaldo que representa la política monetaria del BCE, Aragón debe sacar el mayor provecho al fondo especial puesto en marcha por la UE para la recuperación.
Aunque la reactivación va a costar más tiempo del inicialmente previsto, la caída del PIB de Aragón ya habría tocado suelo. Ahora hay que aprovechar el optimismo global que ha traído la llegada de las primeras vacunas para, con toda la prudencia sanitaria, estimular el tejido productivo, incrementar las inversiones, mantener los ERTE y no aumentar los impuestos.
