El Gobierno ya se plantea aprobar una segunda prórroga del estado de alarma en España, que podría ampliar la situación de excepcionalidad decretada para hacer frente a la pandemia del coronavirus durante otros quince días, hasta el próximo 25 de abril. Los datos de víctimas son trágicos, pero los especialistas defienden la tesis de que la evolución es buena. En este contexto, parece necesario que el confinamiento se prolongue, porque el virus sigue circulando y permitir la movilidad demasiado pronto supondría dar un paso atrás en esta lucha contra la enfermedad.

El médico zaragozano Fernando Simón, asesor principal del Gobierno en la gestión de la crisis del coronavirus, considera que habrá que mantener unas «semanas más» algunas de las restricciones impuestas hasta la fecha para frenar los contagios entre la población. Corresponde al Ejecutivo tomar esta decisión y la de prolongar el estado de alarma más allá del 12 de abril. De hecho, ya estaría buscando apoyos para evitar que el pleno del Congreso en el que se votaría esa extensión del confinamiento (el próximo miércoles o jueves) se convierta en una gran batalla, ante la postura crítica de buena parte de la oposición. Pedro Sánchez y los líderes de los demás partidos deben compartir ideas y propuestas porque la unión en estos momentos también es una gran herramienta para luchar contra el Covid-19.

Los agentes políticos deben trabajar ya en cómo se saldrá del confinamiento, sea dentro de una semana o de tres. Es evidente el riesgo de que si no continuamos con las medidas necesarias durante el tiempo necesario todo el avance que hayamos tenido vaya marcha atrás. Así, si se considera que será imprescindible llevar mascarillas para salir a la calle, hay que poner en marcha inmediatamente los planes de abastecimiento para que los acontecimientos no nos vuelvan a coger sin el material necesario.