La Fundación Seminario de Investigación para la Paz (SIP) ha presentado recientemente su proyecto de trabajo para el 2020. Un verbo define el núcleo de lo que va a ser su indagación y actividades: reconciliar. El proyecto girará en torno a la reconciliación pensada como un verbo y que por tanto desborda la escenificación de un gesto o un acto. Reconciliar impulsa a un hacer profundo que atraviesa las entretelas personales, remitiendo a un modo de estar en el mundo que también incide en los planos social y político. El proyecto indagará sobre la reconciliación con uno mismo, sobre la necesidad de una convivencia reconciliada: en el ámbito familiar, el ciudadano, el de país; de religiones que promuevan la reconciliación y de cómo reconciliarnos con el planeta Tierra.

Al pensar en que reconciliar tiene como sinónimos apaciguar, interceder, mediar, arreglar, olvidar o perdonar; y como antónimos, enemistar, alejar o engañar, la riqueza de un programa de reflexión y acción en torno al verbo reconciliar se multiplica en posibilidades y muestra sus vínculos con la cultura de paz. Indudablemente la educación tiene un papel fundamental para formar personas con habilidad y actitudes para reconciliar, capaces de tender puentes entre quienes están separados por un conflicto. Para que la gestión de los conflictos no se aborde con violencia se necesita educar para la paz. El SIP tiene claro que este es un empeño interdisciplinar que necesita de todas las excelencias, las busca y las ofrece.