Primer desfile de moda Green Fashion en Zaragoza: “Un futuro sostenible es posible”
La cita surge con el objetivo de concienciar de que existe un modo de consumo más sostenible, también en lo que a moda se refiere.
A pesar de que el anuncio de lluvia obligaba al evento a trasladarse a última hora al local de San Pablo 59, ni las inclemencias meteorológicas han podido con el alegato de la organización del Green Fashion, un desfile de moda sostenible que reunía en Zaragoza a varias marcas locales con un objetivo muy claro: “concienciar a la ciudadanía de que existe un modo de consumo más sostenible, también en lo que a moda se refiere”.
Y es que la sostenibilidad no entiende de edades, géneros ni ningún otro tipo de condición. Así lo explica Pilar Mesones, de ‘UnaOcaLoca’, una de sus organizadoras junto a Made In Zaragoza y la asociación de Comercio del Gancho, así como una de las protagonistas de la cita con sus prendas y complementos de reciclaje textil, que compartía espacio este sábado al mediodía sobre la pasarela con otras marcas como Reloved, ARopa2, Julieta con estilo o Ironic Urban.
En el caso de su marca, Pilar apuesta por la reutilización de materiales teniendo por bandera el ‘upcycling’ para la creación de sus diseños. En su taller, ubicado en el corazón del Gancho, una antigua corbata se transforma en una bandana de moda para que ese tejido -ni lo que significó en su momento- no caiga en el olvido. “He presentado la colección ‘Re-Nacer’ realizada íntegramente con materiales reutilizados como sacos de azúcar, fundas de colchón de lana, mantelerías bordadas y otros textiles en desuso”, relata.
También se sumaban a la cita los chicos de ARopa2, dedicados a la gestión de residuos textiles desde una perspectiva que apuesta, sobre todo, por la inserción social de personas en riesgo de exclusión y promoviendo valores de trabajo digno, cooperación, sostenibilidad y compromiso con el entorno. “Además, han contado con la colaboración de varios miembros de la Fundación Rey Ardid tanto fuera como sobre la pasarela” explica Mesones.
Completaban la pasarela Reloved, una tienda de segunda mano del barrio de Las Delicias, vintage, que con su labor también contribuye a la sostenibilidad a la reducción del desperdicio textil. También Ironic, una marca de ropa alternativa con conciencia vegana y unisex, y como lo de la sostenibilidad no entiende de edad, no podía faltar Julieta con estilo, “una marca de moda infantil que apuesta eligiendo materiales orgánicos cuyos artículos demuestran que la moda sostenible puede ser divertida y accesible”, concluye.
Pero, ¿cuál es el objetivo de todo esto?: “Queremos construir un nuevo camino dónde el estilo y la conciencia se unan para crear un impacto positivo en muestro planeta”. Porque en ‘Green Fashion, cada prenda cuenta una historia de compromiso con la sostenibilidad tanto por los materiales utilizados como por las técnicas de fabricación eco-amigables. Porque sí, como defiende Pilar: “Un futuro sostenible es posible”. ¿Sobre la pasarela? Personas reales. “No son modelos”, reivindica Mesones.
Un escaparate a pie de calle
Pero, ¿cómo surge la idea de crear esta primera edición del desfile? Desde Made In Zaragoza aseguran que llevaban mucho tiempo con esta idea rondándoles la cabeza. “Incluso desde antes de la pandemia”, afirman. “Hace unos meses, surgió la oportunidad de incluirlo dentro del ciclo de programación de Economía Circular que estamos llevando a cabo”, relata Raquel Blasco, responsable de la Red de Economía Creativa Made In Zaragoza. Así, junto a Baldesca Lahuerta y Mª José Castiella, responsables de la programación de Zaragoza Activa, se pusieron manos a la obra.
“Nos parece fundamental visibilizar propuestas emprendedoras que desarrollen prácticas sostenibles y conectarlas con la ciudadanía. Es una buena forma de contribuir a que la sociedad en su conjunto tienda a generar menos residuos y en consecuencia a reducir el impacto medioambiental”, asegura Blasco.
Y es que el modelo de la economía circular, tomando como ejemplo el de la propia naturaleza, aboga por utilizar la mayor parte de materiales biodegradables posibles en la fabricación de bienes de consumo, para que éstos puedan volver a ella sin causar daños medioambientales al agotar su vida útil.
“Imaginemos la naturaleza como un supermodelo: todo se aprovecha, nada se tira. Eso es la economía circular. En vez de usar y tirar, buscamos que los productos duren lo máximo posible, darles usos y nuevas oportunidades reinventando y que sus materiales vuelvan a la naturaleza sin causarle problemas”, señala.
Lo local, en el centro
Todo ello inmerso en la I edición de la Feria de la Sostenibilidad, la cual se desarrollará hasta este domingo, “unos eventos con los que pretendemos motivar y sensibilizar a la ciudadanía sobre los beneficios y ventajas que tiene este nuevo modelo de producción y consumo de economía circular”, afirma Castiella.
Y es que el desfile tan solo es uno de los hitos que tendrán lugar a lo largo de este fin de semana, al que se sumarán talleres, un mercadillo con productos eco-friendly, juegos, y un largo etcétera. “Con estas acciones buscamos mostrar a la ciudadanía alternativas viables y atractivas para un consumo más consciente dando protagonismo a proyectos con productos de cercanía y que sus protagonistas también están cerca de nosotros”, añade Lahuerta.
