Maika Makovski, armas de seducción masiva
Hacía ya bastantes años que Maika Makovski no se acercaba por los escenarios zaragozanos, una ausencia que debería estar prohibida legalmente si hubiera alguna ley para defender los derechos de los amantes de la buena música y el buen gusto. Porque lo de esta mujer es de traca, un descomunal despliegue de talento y poderío escénico, de capacidad de seducción, ella sola con su voz, a la guitarra eléctrica o al piano, con una pandereta en un pie y tocando el bombo con el otro.
La Makovski inició su actuación empuñando la guitarra con ‘Love you till I die’, y a un servidor se le aparecieron de pronto en la cabeza los espíritus de Bowie y de Iggy Pop, cual ángeles protectores que avisaban de que todo iba a ir bien. Y así fue, de principio a fin: una Maika radiante y pletórica, dominadora y hechicera, a la que se la veía cómoda y muy a gusto, simpática y comunicativa, disfrutando y transmitiéndolo, haciendo partícipes a todos los espectadores de una suerte de celebración íntima y familiar entre amigos.
Y así, a sus anchas, alternando guitarra y piano, con una aparente facilidad bajo la cual sin duda anida una magia singular, MM fue desgranando piezas como ‘Father’, ‘Body’, ‘Frozen landscape’, ‘Lava love’, ‘Not in love’, ‘Language’ o ‘When the dust clear’, en una brillante exhibición de recursos instrumentales, facultades vocales, personalidad y tablas que desarman al oyente más escéptico. A Maika la hemos visto y disfrutado en varias ocasiones, sola y con banda, pero lo de la otra noche fue sencillamente espectacular. Esta mujer es un lujo en el panorama de la música de este país: armas de seducción masiva.
Abrió la velada la zaragozana Miriam Bronski, que anda preparando nuevo disco, y a quien no se le puede negar que posee una bonita voz; otro asunto es que sus canciones, de marcado tono confidencial y reducido espectro armónico, lleguen a calar.
LA FICHA ****
Maika Makovski. Ciclo En Femenino: Nosotras Tocamos. Artista invitada: Miriam Bronski. Viernes, 22 de marzo de 2024. Centro Cívico Universidad, Zaragoza. Unos 150 espectadores.
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