La orografía del hueco: lectura de la última novela de Pascal Quignard, 'El amor el mar'

Pascal Quignard (1948) es ese hombre con el que uno podría cruzarse por la acera y no darse cuenta. Como también ser alguien al que se mira a los ojos y se descubre, en el estricto sentido de la palabra, un mundo dentro de él. En 'El amor el mar' y el anagrama Roma, la historia del músico Froberger sirve de punta de una lanza hecha de nuevo, exquisito libro. El autor francés que dejó el festival de música barroca que creó en Versalles y la dirección de la editorial Gallimard, entre otros empeños para dedicarse solo a escribir, leer y tocar música, entrega una nueva deliciosa lectura.

Quien haya leído sus tomos de 'Último Reino' o los 'Pequeños tratados', tiene el disfrute garantizado. Los que todavía no lo hayan leído, enhorabuena. Están a punto de mecerse por una prosa rítmica, meditada hasta en los huecos y silencios poéticos que necesita una época de agitación, de barroco convulso como fue la de mediados del siglo XVII en el centro de Europa. Maestro de Bach, contemporáneo del sin par Monsieur de Sainte-Colombe, el compositor alemán Froberger acepta pasar los últimos años en el castillo de su alumna, la princesa Sibylle de Würtemberg. Pero todos los personajes reales como los músicos barrocos pura ficción vuelven a ser las piezas de un engranaje templado que tan bien crea Quignard. 

Como un cuadro lleno de luz difuminada sin punto final pero intuyéndolo, el autor francés lleva mediante el ritmo, los párrafos cortos, los pensamientos profundos y las acciones breves a ese lugar que el lector no sabía que podía ir. Con la tensión del hueco, con la zozobra de la luz y la oscuridad jugando en un claroscuro continuado, lo que acaba viéndose en este nuevo trabajo de Quignard es que poco necesita para armar un aroma, una cadencia, una influencia, un pulso y un fin de época como si allí estuviera.

Sus extenuantes conocimientos de la época barroca, le hacen faro de esas décadas. Y con ese faro cada vez más diáfano es probable que no sea fácil cruzárselo por la acera. Su alejamiento del mundanal ruido tiene la culpa, salvo que algún diciembre venidero tenga que acudir a Estocolmo. No en vano, el Nobel se lo dan a los que tienen un mundo dentro de sí.

LA FICHA

‘El amor el mar’. Pascal Quignard. Traducción de Ignacio Vidal-Folch. Editorial Galaxia Gutenberg. Barcelona, 2023. 266 páginas.