almuerzo en el palacio real
Los Reyes retoman sus actos sin mascarilla y reivindican el español como instrumento de diálogo
Después de un paréntesis de dos años, se ha vuelto a celebrar el tradicional almuerzo en el Palacio Real que precede a la entrega del Cervantes, donde Felipe VI ha defendido nuestra lengua como herramienta de entendimiento.
El Rey ha afirmado este jueves que el español representa “un instrumento de diálogo y entendimiento entre los pueblos hermanos de todo el mundo” y que la palabra “hace libres” a los ciudadanos y supone la base de su progreso social.
Después de dos años sin celebrarse por la pandemia, Felipe VI, junto a la reina Letizia, ambos sin mascarilla, ha presidido en el Palacio Real el tradicional almuerzo que precede a la entrega, este viernes, del Premio Cervantes, que en esta edición ha recaído en la escritora uruguaya Cristina Peri Rossi, ausente en ambos actos por motivos de salud.
El monarca ha lamentado “profundamente” que Peri Rossi no pueda recoger en mano el Cervantes, pero ha mostrado su comprensión: “Ella no ha podido estar, pero nuestra presencia aquí, alrededor de su figura y de su trayectoria, demuestra cuánto nos une”.
A la galardonada, de 81 años, la ha definido como una escritora “siempre honesta, siempre auténtica y siempre original”, además de ser “fiel a sí misma, sin prejuicios y luchadora”.
“Una autora que es, ante todo, una ciudadana del mundo profundamente comprometida con él. Todas las palabras parecen pocas para glosar el legado de quien reconoce que precisamente éstas, las palabras, han sido y son la única compañía que no falla”, ha destacado el jefe del Estado de Peri Rossi, nacida en Montevideo, aunque resiente en Barcelona desde los años 70.
Tras dos ediciones en las que no se pudo organizar ni la ceremonia del Cervantes ni el almuerzo en el Palacio Real, don Felipe ha subrayado que la vuelta a la normalidad supone “un día de celebración”.
También por hermanar de nuevo a académicos, escritores, editores, periodistas, libreros y agentes literarios, de quienes ha resaltado que trabajan para que la lengua común “sea instrumento de diálogo y entendimiento entre los pueblos hermanos de todo el mundo”.
“La celebración del Premio Cervantes une a cuantos os esforzáis en servir a la palabra, que nos hace libres y constituye el fundamento de la ciudadanía y del progreso social”, ha sostenido Felipe VI en su reconocimiento a la literatura en español.
Además de retomar la costumbre de la comida cervantina con el sector literario, el rey se ha felicitado por “poder verse bien las caras” una vez que ha dejado de ser obligatoria la mascarilla en interiores.
El de hoy ha sido el primer acto en el que los reyes han llevado el rostro descubierto en el Palacio Real desde que estalló la pandemia.
Al encuentro ha asistido un centenar de invitados, entre ellos, los escritores Santiago Posteguillo, María Dueñas y Carme Riera, además de los últimos ganadores de los premios literarios más relevantes.
Entre ellos, han estado Vicente Vallés, Juan del Val e Inés Martín Rodrígo, así como la presentadora y humorista Paz Padilla.
Los reyes han saludado a los asistentes con un apretón de manos en el Salón Gasparini antes de pasar a la mesa imperial del Comedor de Gala, donde el rey ha pronunciado su brindis ante el ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, y la embajadora de Uruguay, Teresa Ayala.
La ceremonia de entrega del premio más importante de las letras hispanas volverá a celebrarse mañana con su formato habitual en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid), donde la actriz argentina Cecilia Roth recogerá el galardón en nombre de Peri Rossi.
Don Felipe ha tenido palabras de recuerdo para los dos últimos ganadores del Cervantes, Joan Margarit y Francisco Brines, ya fallecidos, y de los que ha lamentado que no tuvieran el homenaje merecido debido a la pandemia.
