El Aragón que vio Jean Laurent
El Ministerio de Cultura digitaliza 6.000 imágenes de la España del XIX tomadas por este pionero de la fotografía. Hay material de Zaragoza y Huesca
El Ministerio de Cultura y Deporte ha completado la primera fase del catálogo digital de las fotografías de Jean Laurent: 6.000 imágenes, algunas nunca vistas hasta ahora, que constituyen un retrato dispar de la España de la segunda mitad del siglo XIX. Entre ellas hay un conjunto de fotografías tomadas en Zaragoza, Huesca y sus respectivas provincias. Carolina Miguel Arroyo, conservadora del Departamento de Colecciones del Museo del Romanticismo, es la responsable del llamado ‘Proyecto Laurent’ y ha coordinado la elaboración de este primer catálogo, basado en los fondos de una docena de instituciones.
«El problema que teníamos con Laurent es que sus fotografías son muy numerosas y están muy dispersas –señala–. Fue un visionario, y a su enorme capacidad de trabajo hay que añadir el hecho de que fue uno de los primeros en crear una empresa fotográfica. Tenía muchos operarios y comisionados a los que enviaba por toda España para ir ampliando su catálogo. Además, su gran acierto es que logró archivar todo minuciosamente, con un sistema que ha seguido vigente hasta bien entrado el siglo XX».
Las 6.000 imágenes están disponibles en línea y de manera gratuita en una página ‘web’: www.culturaydeporte.gob.es/cultura/areas/museos/mc/ceres/catalogos/catalogos-tematicos/jean-laurent/presentacion.
Allí, el visitante puede contemplar desde retratos de las personalidades más destacadas de la época a vistas de ciudades, monumentos y obras de ingeniería, pasando por tipos y escenas populares de la sociedad española decimonónica. Por parte aragonesa, hay fotografías ‘esperadas’, de espacios tan retratados como la Aljafería, el monasterio de Piedra o la basílica del Pilar, junto a otras más sorprendentes, como el enigmático busto del Papa Luna que Laurent fotografió en Teruel, o la de la torre de la calle de Antonio Pérez, de Zaragoza. Junto a todas ellas, retratos de paisanos ataviados con sus trajes típicos, de Fraga, Zaragoza... El internauta puede acceder a las imágenes organizadas en cinco grandes apartados: ‘Retrato’, ‘Tipos populares’, ‘Imagen de España’, ‘Bellas artes’, ‘Artes decorativas y arqueología’ y ‘Varia’. Uno de los fondos más interesantes responde a ‘Imagen de España’, con 1.584 fotografías de 44 provincias españolas. Un mapa contribuye a facilitar la búsqueda por provincias.
Junto a la publicación virtual de las imágenes se ha editado la monografía ‘J. Laurent. Un pionero en las colecciones españolas’, con nueve estudios de especialistas que acercan al lector al autor y a su época.
En el proyecto han colaborado una docena de museos de toda España, como el Arqueológico Nacional, el Nacional de Antropología, el Sorolla o el del Teatro. Por parte aragonesa está el Museo de Zaragoza, que ha aportado una de las piezas excepcionales del conjunto, un álbum fotográfico que el museo llevó a la Exposición de París de 1878. «Es un álbum encuadernado en piel y muy decorado con 25 láminas de papel que presentan 73 fotografías de los fondos propios del centro –señala Isidro Aguilera, director del Museo de Zaragoza en la actualidad–. Fue una de las principales aportaciones de Zaragoza a la Exposición de París de ese año. Es un álbum que se hizo única y exclusivamente para mostrar la variedad y riqueza de nuestros fondos». Entre las fotografías, imágenes de capiteles y yeserías de la Aljafería, sargas de la venida de la Virgen del Pilar a Zaragoza o el edificio de la Aduana.
Jean Laurent Minier (Garchizy, 1816-Madrid, 1886) aparece ya en 1844 instalado en España y en 1856 abre un establecimiento fotográfico en la azotea del número 39 de la Carrera de San Jerónimo de Madrid. Especializado en un primer momento en el retrato, poco a poco fue ampliando intereses e incluyó entre sus trabajos numerosas vistas de ciudades y monumentos, de espectáculos o de líneas de ferrocarril, que hicieron posible sus viajes por toda la península. En 1860 la reina Isabel II le nombró fotógrafo de cámara y un año más tarde publicó el primero de sus catálogos, en el que predominaban los retratos de los personajes más notorios de la época. Su archivo (12.000 negativos de vidrio) fue adquirido por el Estado en 1975 y lo gestiona el Instituto de Patrimonio.
