Consejos para un escritor novel: la importancia del título

La escritora Sandra Andrés Belenguer ofrece pautas para quienes desean escribir y publicar su primer libro.

Consejos para un escritor novel: la importancia del título
Consejos para un escritor novel: la importancia del título

Una buena novela debe tener una historia que atraiga al lector, unos personajes con los que empatizar, una estructura bien cuidada, unos diálogos eficaces…


Pero, una vez que tenemos todo esto, se necesita un título que llame la atención. No podemos olvidar que hoy en día buena parte de la literatura también depende de la publicidad que se le otorgue y el primer punto en el que un posible lector fija su atención es en el título.


Seguro que has vivido esta situación en más de una ocasión: entras en una librería sin tener un ejemplar concreto en mente y de pronto, tu vista se detiene en una cubierta que llama tu curiosidad. Sin embargo, una vez que has tomado el libro en tus manos, lo segundo que hojeas es el título, que será un detalle clave para que el libro en sí te tiente a saber más sobre él. O por el contrario, si el título no está bien escogido, seguramente tu interés cambiará hacia otro ejemplar.


Cubierta-título-sinopsis. Ésta sería el proceso lógico que cualquier lector suele seguir. Por esta razón, debes pensar bien en el título.


Un punto de partida sencillo para comenzar a pensar cómo será tu título es fijarse en ejemplos ya establecidos.


Rebusca en tu biblioteca personal, visita librerías para ver las tendencias…


Hoy en día los títulos pueden ser muy variados. Pueden ser el nombre del protagonista: 'Marina' de Ruiz Zafón, 'Matilda' de Roald Dahl, 'El capitán Alatriste' de Reverte, 'Hamlet' de Shakespeare… A veces se componen de una sola palabra: 'Temblor' de Maggie Stiefvater, 'It' de Stephen King, 'Oscuros' de Lauren Kate, '1Q84' de Haruki Murakami… En otras ocasiones son muy largos: 'Si tú me dices ven lo dejo todo... pero dime ven', de Albert Espinosa, 'La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina', Stieg Larsson, 'La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y su abuela desalmada' de Gabriel García Márquez… Títulos extraños y sorprendentes: 'El abuelo que saltó por la ventana y se largó', de Jonas Jonasson, 'Las ardillas de Central Park están tristes los lunes' de Katherine Pancol?, 'Cuando Hitler robó el conejo rosa' de Judith Kerr… Se componen de sujeto y adjetivo: 'Las horas distantes' de Kate Morton, 'Amor Inmortal' de Cate Tiernan, 'El castillo ambulante' de Diana Wynne Jones, 'El símbolo perdido' de Dan Brown… También puedes extraer un título de tu propia historia. Una frase clave, una cita importante que mencione uno de los protagonistas, una palabra que resuma las emociones que tu novela hará sentir o que sea símbolo del conflicto que presentas…Puede que el título que buscas esté ante ti, solo hay que saber detectarlo.


Hay muchos autores que únicamente comienzan a escribir una historia cuando han encontrado el título perfecto. Éste les sirve de guía, de inspiración.


Otros se adentran en la historia e imaginan su título cuando ya están finalizando el libro.


No te preocupes si no encuentras el adecuado al principio. Merece la pena emplear todo el tiempo posible en esta tarea. Recuerda que el título será el emblema de tu novela, su seña de identidad.


Incluso puedes hacer una lista, lo que se denominaría una tormenta de ideas. Quizás una de ellas sea la que has estado buscando.


Ya lo decía Ernest Hemingway:

"Después de terminar un cuento o un libro, escribo una gran lista de títulos tentativos. He llegado a escribir hasta cien de ellos. Luego, comienzo a eliminar los que no me gustan, uno por uno”.


Un consejo: un título no debe dar muchas pistas sobre qué trata tu historia o el lector perderá el interés. Debe ocultar siempre la verdadera clave de la narración, permitir que quien lo lea se sorprenda por sí mismo. Prueba con una imagen literaria, una metáfora que sea evocadora. Un ejemplo sería 'La sombra del viento' de Ruiz Zafón.


El título es la carta de presentación de una novela. Puede jugar a favor o en contra de ella. Conseguir que el lector quiera seguir indagando o vuelva a dejarlo en el estante de la librería. Que sea memorable y difícil de olvidar o que se pierda entre otras novedades editoriales.


No tengas prisa por encontrar el tuyo. A veces el propio título llegará a tu mente de forma casi mágica.


*Sandra Andrés Belenguer es licenciada en Filología y escritora.