Soleá y La Mala Rodríguez tiñen de Andalucía la velada sabatina de Pirineos Sur

A la primera le arropan Los Evangelistas, y la segunda es la reina del rap español

Buika -en la foto- convenció anoche en Pirineos Sur de forma incontestable.
Soleá y La Mala Rodríguez tiñen de Andalucía la velada sabatina de Pirineos Sur
ÁLVARO CALVO/PIRINEOS SUR

Una es granadina; viene rodeada de ilustres compueblanos y tiene los genes poderosos del cantaor más atípico y genial de las últimas dos décadas, Enrique Morente, fallecido en diciembre de 2010. La otra es sevillana (nacida en Jerez, pero criada y empadronada en Hispalis), rapera y monarca indiscutible del género en España desde hace más de una década. Andalucía reclama el foco esta noche (22.00) en el Auditorio de Lanuza, gracias a Soleá Morente (la benjamina de las chicas en la familia: Enrique junior es el menor de todos) y La Mala Rodríguez. Las dos andaluzas compartirán escenario esta noche con la destreza selectora de DJ Click (Francia) y la aragonesa Reyes La Queen. 


Soleá ha vivido rodeada de música desde la cuna. En las raíces de su propuesta se mezclan los arrullos (que no ‘quejíos’) escapados de las cuevas de Sacromonte, la psicodelia ‘brit’ y el punto hipnótico del ‘ambient’ característico en la escuela escandinava. A pulir todo ello le ayudan sus compinches y paisanos agrupados bajo el bíblico nombre de Los Evangelistas.  Jota, Antonio Arias, Eric y Florent (Los Planetas, Lagartija Nick, 091; se trata de miembros ilustres de la realeza del pop&roll granadino del último cuarto de siglo) se aliaron con Soleá en el empeño de sacar adelante el EP ‘Encuentro’ en 2013, después de haber colaborado en el homenaje a Enrique Morente un año antes. ¡Qué buena es La Mala!

La Mala  asomó el moño por el panorama musical patrio allá por 2000. ‘Lujo ibérico’, su primer álbum largo, fue disco de oro: de ahí en adelante, con la tímida oposición de la catalana de ascendencia dominicana Ari Puello en los primeros años del milenio, nadie ha podido discutirle el trono femenino del rap nacional. De hecho, no es aventurado situarla en lo más alto del género sin distinción de sexo: comparte olimpo y respeto de sus pares con los zaragozanos Violadores del Verso, Rapsusklei, Tote King, SFDK o su colega Shotta, por citar unos que son entre los muchos que están. 


La Mala tiene cinco álbumes en el mercado: desde el citado debut de 2000 ha cogido una cadencia de tres años entre disco y disco, con ‘Bruja’ (2013) como último exponente y temazos del porte de ‘Quién manda’ como muestras de clase y apertura conceptual, en este caso al reggae, sin perder jamás su deje flamenco. 


La Mala ha colaborado con artistas de todos los pelajes, desde los Calle 13 (Puerto Rico) al mítico (y también boricua) Vico C, el colombiano Cabas, el bachatero dominicano Romeo Santos, el argentino Vicentico (líder de Fabulosos Cadillacs), la mexicana Julieta Venegas y sus compatriotas más ‘psicodancers’, Kinky. Es versátil, contundente y, a la hora del fraseo sobre las tablas, única.