La cineasta Mabel Lozano ha presentado este miércoles en Madrid el documental 'El Proxeneta', una denuncia de la trata de mujeres y donde relata cómo políticos y empresarios son cómplices de este delito en España.

Lozano denuncia que miles de mujeres llegan a España como "pura mercancía", seres vulnerables fáciles de someter a duros abusos psicológicos y físicos; y muy jóvenes, de apenas 18 años.

A esa situación se enfrentan cuando salen de sus países de origen, como República Dominicana, Colombia, Paraguay o Nigeria, también de los países del Este de Europa, para prostituirse y ser obligadas a pagar una deuda que se agranda con el tiempo.

La película es el relato de un proxeneta arrepentido, conocido como "El Cantante", quien tras más de 35 años en el negocio de comprar y vender sin escrúpulos a mujeres, de someterlas a vejaciones, de explotarlas física y económicamente, decidió contar los entresijos de este negocio ilegal ante la cámara.

Al inicio eran dominicanas, en los años noventa, pero con la llegada masiva de colombianas a España se impusieron las prácticas mafiosas y esa lógica se instaló para todas las mujeres, daba igual del país que procedieran. Los rumanos contribuyeron a mantener esas redes de extorsión y engaño, según el testimonio del arrepentido.

"Es un negocio barato para el proxeneta, con beneficios inimaginables", detalla "El Cantante", al detallar que cada mujer traída de América cuesta a los delincuentes como máximo 1.000 euros (300 para el captador y 600 del pasaje de avión) y llegan a España con una deuda de al menos 6.000 euros, a lo que se suman pagos diarios por cuota de cliente, alojamiento, comida, etc...

"Es todo ganancia", admite el arrepentido, quien reconoce que en los pueblos donde él tenía sus burdeles, repartidos por todos los rincones de España, financiaban equipos locales de fútbol, fiestas patronales, eventos, siempre con el beneplácito del alcalde y al lado de otros empresarios locales.

"Se conformaban con las migajas", remarca, al referirse a esa clase política y empresarial que sostiene uno de los negocios más sucios que existen en España, la trata de mujeres, pero también el blanqueo de capitales.

Mabel Lozano remarcó este miércoles durante la presentación de la película, en la Cineteca de Matadero, en Madrid, que "prostitución y trata es lo mismo".

Estuvo acompañada por "El Cantante", al que agradeció su "valentía" por ayudar a desenmascarar a la mafia de la prostitución, por contribuir a conocer cómo se blanquea en España el dinero procedente de ese delito y cómo funciona el negocio por dentro.

"Hay cosas que no se pueden perdonar, pero hoy quiero pedir perdón a todas las mujeres que han sufrido tanto por hombres como yo", expresó el proxeneta arrepentido durante la presentación.