Auditorio de Zaragoza

El Cigala promete solo "flamenco" en un nuevo ciclo

Farruquito, Mayte Martín o Duquende son otros de los nombres que figuran en el cartel de este ciclo, que comienza el 4 de febrero.

El Cigala, en el Auditorio
Diego 'el Cigala' promete solo "flamenco" en un nuevo ciclo del auditorio
T. GALAN/EFE

El cantaor madrileño Diego 'el Cigala' ha prometido este viernes "mucho flamenco" en la décimo segunda edición de Flamenco Zaragoza, junto a figuras como Farruquito, Mayte Martín o Duquende, tras un año de "muchos éxitos" con 'Cigala&Tango'.


"Mi espectáculo va a ser de flamenco; tengo muchísimas ganas. Me siento muy feliz de poder cantar flamenco durante dos horas", dice, aunque reconoce que la gente le pedirá que cante tangos como 'El día que me quieras', 'Soledad' o 'Nostalgia'.


Y cantará por soleares, tarantos, bulerías, alegrías, fandangos o cartageneras, "todos esos cantes que me gustan a mí", ha anunciado el Cigala en una divertida rueda de prensa, mezcla de conferencia, monólogo y recital por bulerías.


El ciclo de flamenco se llevará a cabo del 4 de febrero al 27 de abril en las salas Mozart y Multiusos del Auditorio zaragozano en el que el Cigala ya ha actuado numerosas veces aún antes de llegar a la cumbre de los grandes del flamenco.


"Siempre que vengo a cantar a Zaragoza es como un reto porque la afición que hay aquí es buenísima" y "me siento como en casa", ha dicho el Cigala, para afirmar a renglón seguido que en estos tiempos de crisis "una buena dosis de música amansa a las fieras, por decirlo de alguna manera".


El ciclo de flamenco comenzará el 4 de febrero con Manuel de la Fragua; el 17, será Mayte Martín ("me mola mucho", ha dicho de ella el Cigala) y como telonera Sandra Carrasco; el 15 de marzo, Farruquito; el 16, Duquende y Jesús Giménez "Tutero" de telonero, y el 27 de abril cerrará este ciclo la joven promesa Marina Heredia con el grupo Israel Giménez.


De Duquende, el Cigala solo ha tenido elogios: "Es un pedazo de cataor como la copa de un pino, una de las voces del flamenco que nos queda, cañero, de los que hace daño emocionalmente".Un año de éxitos

Para Ramón Jiménez Salazar, como así figura en su pasaporte, el 2011 ha sido un año "maravilloso de muchos éxitos", con dos discos de oro en Argentina y Colombia por "Cigala&Tango", mejor directo del año para 'The New York Times' y un "Grammy", pero todo eso, dice, "me lleva a no perder lo que soy: un cantaor de flamenco".


"Yo canalizo todo por el mundo del flamenco porque si no, no me salen las cosas", asegura.


Se muestra muy agradecido por la acogida que ha tenido su incursión en el tango, pero insiste en que toda su carrera, "con todas esas incursiones" es el flamenco. "Al fin y al cabo soy flamenco por los cuatro costados".


Aun así, reconoce que se quedó "loco" con el tango, y que su incursión en este estilo fue "una locura sana musical" y lo hizo "por amor a la música" cuando le regalaron la antología de Carlos Gardel y Roberto Goyeneche.


Para el Cigala, el tango y el flamenco son dos estilos con muchas similitudes. Son, dice, "dos músicas de mucha alma, de mucho sentimiento", una música "nocturna" y "nostálgica".


"La magia que tiene el flamenco es la capacidad de adaptarse a otras músicas, a otros ritmos, pero esas otras músicas en un momento dado, adaptarse al flamenco les cuesta. Dile a un músico de jazz que se adapte al tiempo de la bulería", señala.


El Cigala afirma que "cuando dominas la bulería, dominas todos los palos del flamenco".


"Todo lo canalizo siempre por la bulería; todo lo que me cuadra en la bulería me cuadra en todos los palos. Hay notas de tango que he cuadrado por la bulería o un fandango", afirma.


El cantaor asegura que el flamenco "ya era universal", incluso antes de que en 2010 fuera declarado Herencia Cultural Intangible de la Humanidad, "porque ya lo dejaron así los grandes, desde Manolo Caracol, a la Perla de Cádiz, o Juan Talega".


"Todos estos ya dejaron de por si esa fuente que para el mundo de la música todavía era autóctono, cuando se veía el flamenco como algo 'typical Spanish' y punto y ya está", afirma.


Para el cantaor madrileño, que prepara un disco de una actuación en directo en el Palau de la Música de Barcelona, el flamenco gusta mucho en todo el mundo, particularmente, en Francia, "donde flipan" con él, y en Inglaterra y Alemania, pero en Japón, dice, "lo que hay es pasión".


Y en Estados Unidos, aunque no entienden una bulería, "se les eriza el vello" con su sentimiento, mientras que en América Latina el gran público no aguanta un concierto de flamenco solo con guitarra, si no va acompañado de un piano, "a pesar de que tengamos el mismo lenguaje", sentencia.