CINE

Las estrellas se sueltan la melena en Venecia

Las estrellas han dejado múltiples curiosidades y anécdotas tras su paso por la alfombra roja en esta 68 edición de Venecia, a punto de concluir.

El director norteamericano Abel Ferrara
Las estrellas se humanizan en el Lido veneciano
AFP

Keira Knightley es una fiel seguidora del West Ham londinense, pero Viggo Mortensen le dio una insignia del San Lorenzo argentino durante el rodaje de 'Un método peligroso'. Y Evan Rachel Wood se tiró a la piscina vestida tras el estreno de 'Idus de marzo'.


Son algunas curiosidades de las estrellas que han paseado por la alfombra roja en esta 68 edición de Venecia, ya a punto de acabarse.


La actriz británica se mostró de lo más distendida en una entrevista con un reducido grupo de medios de comunicación. Tanto que iba descalza mientras conversaba en una terraza de una decadente villa privada del Lido de Venecia.


Y contó divertida cómo durante el rodaje de 'Un método peligroso', el filme de David Cronenberg presentado a competición en Venecia, Mortensen -"¡está loco por el fútbol!", dijo entre susurros- le regaló una insignia del San Lorenzo.


"Peor yo soy una chica West Ham, lo cual es muy doloroso en este momento", afirmó la actriz de 'Quiero ser como Beckham', que sin embargo no sigue ahora de cerca el fútbol porque hace cinco años que vive sin televisión.


El que sí lo sigue y demuestra en cada momento su afición es Mortensen. Hasta tal punto que en la rueda de prensa de presentación del filme de Cronenberg plantó delante de su micrófono un peluche con los colores del San Lorenzo regalado por un fan.


Aunque para locuras la de la joven actriz estadounidense Evan Rachel Wood, que pasó por Venecia con 'Idus de marzo', dirigida por George Clooney. En la fiesta celebrada tras el estreno en Venecia de la película, Wood se tiró vestida a la piscina tras cantar canciones de Janis Joplin y Tina Turner. Pero todo tiene una explicación.


"Hacía calor y George había prometido desde el rodaje que después de la premier todos saltaríamos a la piscina, vestidos, pero fui la única en hacerlo. George se quitó su reloj y estaba preparado para saltar y Paul (Giamatti) también. Pero se rajaron", explicó la actriz entre risas.


Y además, antes de llegar a Venecia, todo el equipo pasó unos días en la casa que Clooney tiene en el lago Como (norte de Italia), donde se dedicaron especialmente a jugar al baloncesto.


A punto estuvo la actriz de ganar a su director -"un excelente jugador"- lo que no hubiera sido de extrañar dado su amor por el deporte, con una larga práctica del taekwondo.Afición al tabaco

Menos deportista se muestra Paul Giamatti, su compañero de reparto. "Debería cuidarme más", admite ante los periodistas, mientras reconoce que volvió a fumar tras tres años en el rodaje de la serie 'John Adams' en Hungría.


Una afición al tabaco que comparte la británica Kate Winslet. En una entrevista con un grupo de medios, tras pedir permiso, comenzó a liarse cigarrillos. Y entre entrevista y entrevista de televisión sobre la serie 'Mildred Pierce' salió al patio del hotel para fumar.


Un hotel al que trasladaron sus entrevistas tras sus quejas por el excesivo calor que hacía en la terraza inicialmente prevista. La humedad ha hecho estos días de Venecia un verdadero infierno, aunque sus compañeros de reparto de 'Un dios salvaje', Christoph Waltz y John C. Reilly, se mantuvieron en el lugar previsto y lo soportaron estoicamente.


De lo que sí se quejaron fue de la exigencia del director de la película, Roman Polanski, de ensayar durante dos semanas antes del rodaje y de obligarles a interpretar todo el guión "¡dos veces al día!", según explicó Reilly.


Y de los rodajes también hubo actores que contaron cosas interesantes. Rodaje tras dar a luz

Como la italiana Monica Bellucci, que comenzó a rodar 'Un été brûlant' apenas un mes después de dar a luz a su segunda hija, Léonie, fruto de su matrimonio con el actor francés Vincent Cassel.


"Tenía que estar sexy en las escenas y cada dos horas parar todo para amamantar a mi hija", dijo la actriz, que reveló que, hasta ahora, sus dos hijas -la mayor Deva, de seis años- siempre van con ella a los rodajes.


Un paso el de la italiana por Venecia que ha dejado huella, al igual que el del austriaco Michael Fassbender, que se ha convertido en toda una estrellas con un par de películas -'Malditos bastardos' y 'X-Men. Primera generación'- y que es uno de los grandes favoritos para llevarse la Copa Volpi del Festival por 'Shame'.


Un actor simpático y cercano, que saluda con un expresivo "¡Calor!" cuando oye hablar en español.


Bromea con una periodista alemana por si en algún momento le sirvió copas cuando trabajaba en un bar en Berlín. Y acaba de volver de un viaje en moto con su padre por Sarajevo.


Detalles que acercan a las estrellas a la vida real y que se alejan de la frialdad que algunas de ellas muestras para mantener la distancia con el mundo. Como ha sido en Venecia el caso de Madonna, que reservó cinco hoteles diferentes para evitar cualquier intromisión de prensa o de fans.