Una década, ocho películas y millones de seguidores. Harry Potter se convirtió en un fenómeno literario y, después, cinematográfico. La saga más taquillera de la historia echa el cierre con ‘Harry Potter y las reliquias de la muerte. Parte 2’, desenlace de las aventuras del joven mago. Es, con mayúsculas, la película del verano. El filme se centra en el enfrentamiento final entre Potter y el poderoso (y malvado) lord Voldemort, duelo para el que el protagonista se preparó desde que ingresó en la escuela de Hogwarts al ser considerado el elegido.

Como saben, la adaptación del último libro de J. K. Rowling se dividió en dos entregas, la primera estrenada en noviembre de 2010. La novela era demasiado larga para abarcarla en un único largometraje, pero a nadie se le escapa que la decisión de partirla se debió a motivos económicos. El volumen de dinero que mueve la marca Harry Potter invitó a ello. Por algo se proyecta en 3D: para aumentar la recaudación por sala y, de paso, ofrecer al espectador mayores dosis de espectáculo. Visto el negocio, no se puede descartar que haya ‘precuela’.

Lo que en 2001 comenzó como el relato de las andanzas de un niño mago y sus amigos derivó progresivamente, conforme los personajes entraban en la pubertad, en una trama y un argumento más tenebrosos al tratar, en el fondo, de la eterna batalla entre el Bien y el Mal. Un cambio de tercio que agradecieron quienes renegaban del tono infantil del principio. La oscura ‘Harry Potter y el prisionero de Azkabán’, la tercera de la franquicia, sigue siendo la mejor valorada por crítica y público.

En la continuación de ‘Las reliquias de la muerte’, se desvela (para el que aún no lo haya leído) el destino de Harry, Ron, Hermione y el resto de personajes. El de Potter estaba claro desde el primer momento: luchar cara a cara con Voldemort. ¿Qué ocurrirá en el clímax final? La profecía dice que solo puede quedar uno.

David Yates dirige la película, en su cuarta contribución a la franquicia. Los populares Daniel Radcliffe, Emma Watson y Rupert Grint, niños en 2001 y ahora casi adultos, están acompañados una vez más por intérpretes de lujo: Ralph Fiennes, Alan Rickman, Timothy Spall, Michael Gambon, Bill Nighy, John Hurt, Helena Bonham Carter y un largo etcétera.

Hermana coraje

Si no le entusiasma Harry Potter, hay otras seis novedades con objetivos más modestos. Hilary Swank protagoniza ‘Betty Anne Waters’, obra inspirada en hechos reales que combina drama familiar y cine de juicios, lo que le da un aire de telefilme (lo que no significa que su calidad sea dudosa). Ambientada en la América profunda, Swank interpreta a una mujer que sacrificó casi 20 años de su vida para ayudar a su hermano (Sam Rockwell), condenado por un homicidio que ella estaba convencida de que no cometió. Dirige Tony Goldwyn (‘El último beso’) y destaca la presencia de Melissa Leo, Juliette Lewis o Minnie Driver.

Del resacón a la convención

‘Resacón en Las Vegas’ y su secuela han propiciado que empiece a resultar familiar el rostro de Ed Helms. El actor encarna a un inocentón agente de seguros en ‘Convención en Cedar Rapids’, comedia pequeña y de tono ‘indie’ (se exhibió en Sundance) realizada por Miguel Arteta, que hace unos años obtuvo notoriedad gracias a ‘The good girl’. El personaje de Helms acude, en representación de su empresa, a una convención en la que conocerá a unos compañeros (John C. Reilly o Anne Heche) que le harán ver la vida de otra forma.

Afrontar la muerte

La muerte nos aterroriza y preferimos no pensar en ella, aunque tendremos que afrontarla. La producción alemana ‘El fin es mi principio’ reflexiona sobre el ocaso de la vida a partir de las conversaciones entre un anciano (gran papel de Bruno Ganz) y su hijo. El padre le hablará de sus experiencias y de cómo armarse de valor ante el inevitable adiós. La película de Jo Baier, emotiva y de tono existencial, se inspira en una novela de Tiziano Terzani.

Amistad a ritmo de Bob Dylan

El francés Olivier Dahan (‘La vida en rosa’) cruza el charco y debuta en la industria estadounidense con ‘Nuestra canción de amor’, drama de amistad y superación que tiene como alicientes su reparto (Renée Zellweger, Forest Whitaker y Nick Nolte) y el hecho de que la música ha sido compuesta por Bob Dylan. Es una ‘road movie’ protagonizada por una mujer en silla de ruedas y un discapacitado psíquico.

Antes de la guerra

Quien esto escribe les hace una recomendación: ‘Cirkus Columbia’, de Danis Tanovic (‘En tierra de nadie’), quien ofrece un drama con toques de comedia negra sobre los conflictos de la antigua Yugoslavia. Ambientada a principios de los 90, antes de la guerra, muestra las consecuencias del regreso a Bosnia, tras 20 años en el exilio en Alemania, de un hombre que huyó de los comunistas. Reaparece con mucho dinero y una bella amante, y su vuelta afectará a la mujer y al hijo que abandonó. Una película notable que causó una grata impresión en el pasado Festival de San Sebastián.

Comedia excéntrica

Nada menos que cuatro años después de su rodaje (y con dos semanas de retraso respecto a su estreno en España) llega la danesa ‘Cuando un hombre vuelve a casa’, de Thomas Vinterberg, uno de los fundadores del extinto movimiento Dogma. Se trata de una alocada y estrafalaria comedia que narra cómo afecta a una pequeña localidad el regreso de uno de sus vecinos ilustres, un cantante de ópera. El filme se proyecta en versión original subtitulada.