LIBROS

Un viaje a las raíces de un poeta dulce

Joaquín Casanova, Mariano Ibeas, Miguel Ángel Marín e Inmaculada Marqueta.
Un viaje a las raíces de un poeta dulce
carlos moncín

A través de las páginas de 'Albeta' puede contemplarse de primera mano el transcurrir del primer tercio del siglo XX. Sin embargo, ese no es el principal objetivo de su escritor, Miguel Ángel Marín Uriol, que ha querido con este libro homenajear a su padre plasmando sus anhelos y el espíritu de las tierras en las que vivió. La presentación de la nueva obra de este escritor zaragozano, de Mira Editores, tuvo lugar ayer por la tarde en la Librería Central de Zaragoza.

"Este relato ni es histórico ni deja de serlo", explicó el autor, que por una vez ha abandonado su faceta de poeta para adentrarse en la prosa. El libro tiene como protagonista a Albeta, un pastor nacido en un pueblecito aragonés al sur del Moncayo. Poseedor de una inteligencia superior, sus circunstancias familiares no impiden que a lo largo de la novela se convirtiera en una figura excepcional. "La historia comienza en 1907 y termina en 1936, con el final de un mundo que todos conocemos", expuso el escritor.

El acto, en el que intervinieron el profesor Mariano Ibeas y el editor Joaquín Casanova, contó con unos 100 asistentes, entre familiares, amigos, escritores y pasteleros -antigua profesión del autor-. "Estoy gratamente sorprendida de la buena acogida de la presentación -aseguró la poeta Inmaculada Marqueta, mujer de Miguel Ángel-. Mi marido es una persona muy querida y hoy se lo están demostrando". Entre el público se encontró a los escritores José María Serrano, María Teresa Ezquerra, Carmen Salas y Pedro Alonso Cordel; al escultor José Martínez Aguado y el antiguo presidente de las Cortes de Aragón José María Hernández de la Torre.

"El protagonista procede de una tradición literaria muy amplia, que nace con Cervantes -aseguró el profesor Mariano Ibeas- y continúa con otros personajes de la literatura como Fray Gerundio de Campazas, José Francisco de Isla y Rojo, Pedro Saputo, o el turolense Braulio Foz". Por su parte, Joaquín Casanova mostró su satisfacción por editar una obra de "un personaje de gran prestigio humano y profesional".

Conocido por muchos como el poeta pastelero, por su profesión como maestro chocolatero y propietario de las pastelerías la Esperanza, Miguel Ángel Marín (Zaragoza, 1945) publicó su primer libro de poemas en 1982. Desde entonces, sus más de 30 volúmenes han sido galardonados con varios premios nacionales e internacionales.