MÚSICA ELECTRÓNICA

Tiësto, el DJ más caro del mundo, despide el verano en Las Playas

El 'disc jockey' holandés de fama planetaria y cachés de vértigo aterriza hoy en Zaragoza con su jet privado para ejercer de maestro de ceremonias en la que promete ser una espectacular fiesta a orillas del Ebro.

El holandés DJ Tiësto ha hecho un hueco en su apretadísima agenda para pinchar esta noche en Zaragoza.
Tiësto, el DJ más caro del mundo, despide el verano en Las Playas
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Difícilmente pisará el Sónar de Barcelona. Posiblemente, nunca aparezca su nombre en el cartel del Monegros Desert Festival. Ni obtendrá el visto bueno de los paladares más exquisitos entre los amantes de la música electrónica. Podrá discutirse sobre si es el mejor, pero de lo que no cabe duda es de que Tiësto es actualmente el DJ más famoso (y más caro) del mundo. Y hoy pincha en Zaragoza, en Las Playas del Ebro.

 

Sus sesiones se cuentan por llenazos, y eso cuesta mucho dinero. Hasta el punto de que a Tiësto le acompaña indefectiblemente la etiqueta de "DJ mejor pagado". El prestigio será para Hawtin o Cox, pero, hoy por hoy, la pasta se la lleva Tiësto.

 

Como ocurre con cualquier estrella, traerlo no ha sido fácil. La agenda del DJ es apretadísima: llega el domingo al mediodía desde su tierra natal, Holanda, en su jet privado, y se va el día siguiente a Ibiza, donde cerrará su residencia en la conocida discoteca Privilege. Después, tomará rumbo a Estados Unidos y no se pondrá ante unos platos europeos hasta el verano de 2010.

 

Para aquellos a los que el domingo les pueda parecer un día raro para irse de fiesta trancera, baste decir que la lista de espera para contratar una sesión del holandés en sábado es de dos años. Todo lo que concierne a Tiësto es desorbitado. Empezando por su caché. Los rumores hablan de que ha llegado a cobrar 200.000 euros por una sesión.

 

De lo que se lleva por su visita a Las Playas, el promotor, Miguel Ángel Ramos, no quiere soltar prenda por eso de que "está feo hablar de dinero", pero da pistas: "Únicamente diré que por su reciente sesión de Pachá Pineda cobró 40.000 euros, y en ese caso iba a una sala con el escenario ya montado". Solo este verano ha actuado en España 26 veces. ¿Sacamos la calculadora?

Gran montaje

En Zaragoza, al montante de su contratación hay que añadir el coste del montaje especialmente preparado para esta noche, que incluye un escenario formado por una plataforma de 50 metros de ancho con pantallas LED de 14 metros alto. No en vano, el espectácul es una de las grandes bazas de Tijs Verwest (su nombre auténtico). Sus puestas en escena son de tal envergadura que él solito ha sido capaz hacer frente a estadios enteros.

 

Ajeno a los que le acusan de ser ramplonamente comercial, Tiësto apuesta sin complejos por un epatante montaje audiovisual en el que envuelve unas sesiones de maletas nada arriesgadas y pensadas para grandes masas. El objeto es claro: montar la gran fiesta. Así, lo de esta noche en Las Playas del Ebro promete ser una de esas que se recordarán muchos años entre los aficionados al género, y particularmente al trance, la especialidad del holandés.

 

Cerca de 7.000 personas (se han vendido entradas hasta en Galicia) pueden reunirse esta noche en torno a las palmeras de Las Playas.

No en vano, el peculiar entorno junto al río, ha sido una de las bazas de los organizadores para tentar a Tiësto. "Se quedó flipado con el sitio", explican desde la organización. "Eso sí -añaden con sorna-, nadie le ha dicho el frío que suele hacer". No hay problema. Precisamente, para calentar el ambiente -en lo que en el argot del género se conoce como 'warm up'-, estarán el navarro Iván de Muru y el también holandés San, un DJ, éste último, reconocido por la revista 'DJ Mag UK'. Tras Tiësto, y si quedan fuerzas, se podrá bailar al ritmo de Raver, de Madrid.

 

Las entradas se venden a 25 euros (hoy ya no pueden comprarse a través de Internet) en Las Playas y Café Tíbet. La fiesta comienza a las 19.00 y se alargará hasta las 3.30. Además de la arena y de las palmeras, los asistentes podrán disfrutar de una zona de carpas, 'lounge', 'chill-out' y una 'luxury room'.