El escritor salmantino Manuel Jesús Prieto ha publicado el libro "Curistoria", en el que recoge unas 400 curiosidades y anécdotas de la historia que ha ido recabando a lo largo de varios años de trabajo.

El escritor, que ya tiene publicado otro libro técnico sobre informática, comenzó a escribir las curiosidades y anécdotas en el 2006 en un blog en internet, curistoria.blogspot.com, que en la actualidad mantiene activo y en el que continúa añadiendo nuevos textos.

Hace unos meses, la editorial Evohé le ofreció convertir el contenido de ese blog en un libro dentro de su colección "Didaska", que acaba de ser publicado bajo el nombre "Curistoria. Curiosidades y anécdotas de la Historia", en el que se pueden leer textos de muy distintas temática.

Así, el lector podrá conocer diversas curiosidades sobre personajes tan dispares como Picasso, Albert Einsten, Napoleón, Churchill, Felipe III o Pizarro, son algunos de los protagonistas de las anécdotas que ha recopilado el autor.

La historia que inspiró la película sobre el río Kwai, un recopilatorio sobre muertes ridículas, el origen de la Guerra de los Pasteles, los viajes de las campanas de Santiago de Compostela o el cuadro "La rendición de Breda" de Velázquez, son otros ejemplos de las muchas curiosidades que se pueden leer en el libro.

Manuel Jesús Prieto no ha reunido todas estas anécdotas históricas "de una forma activa, sino más bien a través de marcas en los libros que iba leyendo o recortes de algunas revistas y periódicos especializados" y su contenido ha pasado de "ser corto y conciso, a ser un poco más largas", según han avanzado los años.

Sin embargo, reconoce que "en muchos casos una pequeña frase en una novela, ha sido la causa de que empezará a tirar del hilo, a investigar y ese trabajo a acabado en una entrada en el blog".

Aunque el autor no suele nombrar las fuentes de las que ha obtenido la historia, espera que "a partir de 'Curistoria', algún lector acabe leyendo libros más profundos sobre algún hecho o época que le llame la atención".

El estilo, claro y directo, con el que están escritas las anécdotas históricas obedece al lenguaje utilizado en internet, aunque "un buen porcentaje de las mismas han sido reescritas de manera casi completa" para su publicación en papel.