HUESCA

El agua ahoga la escultura de Carneiro en Belsué

La obra, que forma parte de la colección del CDAN, lleva una semana anegada por la crecida del arroyo junto al que se sitúa

"Los árboles florecen en Huesca", como se titula la pieza creada por el artista portugués Alberto Carneiro para la colección Arte y Naturaleza del CDAN, apenas asoma ahora en su emplazamiento. Ubicada en una pequeña explanada, en medio de una chopera y cerca de un arroyo, en un entorno rodeado de montañas junto al núcleo de Belsué, en la comarca de la Hoya, se ha visto anegada por el agua ante la gran crecida que ha sufrido el riachuelo.


Inaugurada el verano pasado, la obra, de unos cinco metros de altura, ha quedado prácticamente oculta y apenas sobresale un metro sobre la gran masa de agua en que se ha convertido la arboleda. Esta escultura está configurada por cuatro muros de piedra que forman un cuadrado no cerrado al que se penetra para descubrir en su interior otras tres altas piezas formando un triángulo dentro del que "crece" simbólicamente un árbol de bronce, realizado a partir de tres distintos árboles del jardín que el artista tiene y cultiva en su casa de Coronado.


Pese a lo impactante de la imagen, la obra no corre riesgo de derrumbarse ya que, tal y como explicó Teresa Luesma, directora del CDAN, en el proyecto ya se contemplaba la posibilidad de una avenida, por lo que la cimentación y anclaje de la obra así como el ensamblaje de sus piezas están realizados para aguantar la presión de la riada. "Yo estoy tranquila, la estructura está pensada para que resista", dijo Luesma. "Para ver los daños habrá que esperar a que baje el agua, que lo hará muy lentamente, pero el material, piedra de Calatorao, tampoco esperamos que sufra, salvo que estará en otro tono hasta que se seque, y, desde luego, habrá que limpiar y sanear la gravilla".