Un impactante retrato de Francis Bacon jamás exhibido en público y un desnudo de Lucian Freud han salido a la venta tras saberse que el misterioso comprador que pagó hace unos días precios récord por dos obras de ambos artistas y rompía el techo de su cotización no era otro que el multimillonario ruso Roman Abramovich, propietario del equipo de fútbol Chelsea. Abramovich saltó la banca al gastar 77 millones de euros en la compra de las dos pinturas más caras del desaparecido genio irlandés y del octogenario maestro británico. Demostraba así cómo, una vez más, en tiempo de crisis, el dinero halla un fantástico refugio en el arte. La fortaleza de este mercado quedó en evidencia la semana pasada en las ventas en Nueva York, que establecieron récord tanto en Christie's como en Sotheby's.

Abramovich pagó 55,4 millones de euros por la obra de Bacon "Tríptico, 1976" en la subasta de Sotheby's, mientras que en la subasta de Christie's adquirió por 21,5 millones de euros el monumental desnudo "Benefits Supervisor Sleeping" (1995), de Freud, que se convirtió en la obra más cara de un artista vivo vendida en una subasta.

Esta transacción sacaba del primer puesto de la lista a Jeff Koons como el artista vivo más cotizado. Por una obra del ex esposo de Cicciolina se pagaron unos 14 millones de euros en 2007.

Ni Sotheby's ni Christie's han confirmado que sea Abramovich el comprador, pero, según la revista londinense "The Art Newspaper", la "Biblia" del sector, que cita fuentes cercanas al mercado del arte, las dos pinturas decorarán la nueva mansión del magnate ruso en Londres. Abramovich, que ha forjado su fortuna con el petróleo, se ha interesado por el arte gracias a su novia, la joven modelo de 25 años Daria Zhukova, que, tras dejar las pasarelas, se propone abrir una galería de arte en Moscú.