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San Gil logra el apoyo del PP vasco para adelantar el congreso regional a julio

El congreso estaba previsto que se celebrara tras las elecciones autonómicas vascas, que todavía no han sido convocadas.

La presidenta del PP vasco, María San Gil, consiguió este lunes el apoyo de su junta directiva para adelantar a julio el congreso regional de la formación. La ejecutiva vasca de los populares trató de resolver durante toda la tarde la crisis abierta después de que San Gil anunció su intención de adelantar el congreso, previsto inicialmente para otoño, y dejar el cargo si no recuperaba la confianza perdida en el presidente nacional, Mariano Rajoy, y si este no rectificaba y volvía a los principios contrarios a cualquier colaboración con el nacionalismo.


Caras largas y serias a la entrada de la reunión, que comenzó a las 19:00 horas, en la sede del partido en San Sebastián. Unas cuatro horas después y tras el debate, la propuesta de adelanto del congreso para los días 18 y 19 de julio fue aprobada con 28 votos a favor, uno en contra y 32 abstenciones.


En la reunión estuvieron presentes destacados dirigentes como Ignacio Astarloa, José Eugenio Azpiroz o Leopoldo Barreda, hasta completar los 50 miembros de la dirección regional. El único que se pronunció a la entrada fue el eurodiputado y ex presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, quien cerró filas en torno a la figura de su sucesora. Contrariado, denunció que "algunos" de sus compañeros han intentado en los últimos días que San Gil "pase de Juana de Arco a Juana la Loca". "Eso no puede ser" protestó el eurodiputado para quien su compañera "es un referente nacional de todo el PP, del primero hasta el último, desde Mariano Rajoy hasta el último afiliado".


"Por eso, tenemos que apoyar a María San Gil porque aquí estamos para unir, para que venga gente, no para echar a nadie, no para dividir ni para que se vaya absolutamente nadie" insistió en una desesperada apelación a la unidad en torno a la presidenta del PP vasco.

Voluntad de escuchar


Fue la propia presidenta quien abrió la reunión con la exposición de un informe en el que detalló de forma pormenorizada los hechos que le han llevado a perder la confianza en Mariano Rajoy, a plantear el adelantamiento a julio del congreso previsto para otoño y amenazar incluso con su dimisión si no son atendidas sus demandas.


Los críticos con esta decisión unilateral de San Gil habían acudido la reunión con "actitud conciliadora y voluntad de escuchar" los argumentos. Si mantenía en su postura, no habían descartado emplazar a San Gil a rectificar, a adoptar la línea política marcada por la dirección nacional o a "dimitir".


Representantes de este sector consultados señalaron que este último escenario "no es deseado por nadie, porque nos situaría ante la sociedad como una formación lastrada por la fractura interna, con necesidad de buscar un nuevo líder y hacerlo además a escasos meses de la celebración de las elecciones autonómicas". "Nos ha costado mucho sacar la cabeza en Euskadi y esto nos hundiría y situaría en parámetros no deseados cuando éramos un partido marginal, sin capacidad de influencia" y añadieron que, además, "los compañeros que nos han dejado y que han entregado sus vidas por defender nuestros valores no merecen esto".