MADRID

Ruiz-Gallardón: "Dedicarse a la política puede traer momentos ingratos"

El alcalde madrileño elude pronunciarse sobre Cobo y los últimos acontecimientos en turno a la puja por controlar Caja Madrid.Resalta que las compensaciones de la labor pública están por encima de la adversidad

Alberto Ruiz-Gallardón dijo ayer que "dedicarse a la política puede traer momentos duros y difíciles y, sin duda, momentos ingratos que tienes que superar, pero tiene muchas compensaciones que están por encima de cualquier dificultad". El alcalde de Madrid hizo esta afirmación en un discurso sobre la capacidad de la acción de Gobierno para transformar la ciudad pronunciado durante una visita a cinco equipamientos sociales de Carabanchel.

 

Se refería en concreto a la transformación experimentada por ese distrito en los últimos años, especialmente tras el soterramiento de la M-30, aunque muchos vieron en sus palabras una alusión a los últimos acontecimientos que está viviendo el PP en los que tanto él como su mano derecha, Manuel Cobo, son protagonistas. Su intervención se producía cuando su número dos comparecía ante el Comité de Derechos y Garantías del PP por sus polémicas críticas contra Esperanza Aguirre, presidenta madrileña y que acumula una larga lista de disputas con el primer edil.

 

El alcalde no tuvo ni una sola palabra relativa a la comparecencia a pesar de la expectación generada por su visita. Se limitó a recordar que hoy, tras la Junta de Gobierno, tiene lugar la tradicional rueda de prensa de los jueves No obstante, la citada afirmación daba lugar a todo tipo de interpretaciones sobre el polvorín interno del PP.

 

El martes, en el Comité Ejecutivo Nacional del PP, el dirigente no recibió ni aplausos ni adhesiones de los altos cargos después de tomar la palabra, lo que evidencia el enfado por los últimos acontecimientos en torno a la lucha por el control de Caja Madrid.

 

En el discurso pronunciado en Carabanchel, el regidor abogó por tener un "impulso rebelde" para transformar la realidad. "Aquel día que cualquiera de nosotros (en referencia a las autoridades) se asome a la ventana de su despacho y se sienta complaciente con aquello que ve habrá dejado de ser un buen gestor, porque tiene que haber un impulso rebelde que lleva permanentemente a la transformación", esgrimió el popular.

 

La maratoniana visita de Gallardón se prolongó durante más de tres horas, tiempo suficiente para que recorriera hasta cinco equipamientos del distrito (el centro de atención social a la mujer María de Maeztu, el centro cultural Fernando Lázaro Carreter, la escuela infantil municipal Amapolas, el centro de día de enfermos de alzhéimer La Magdalena y el centro básico de servicios sociales Zaida) e, incluso, le permitió hacer parada en un acto no programado, la visita a la capilla ardiente de Francisco Ayala, ya que el tanatorio de San Isidro se encuentra en el distrito. Durante la visita, estuvo acompañado, entre otros, por el presidente del distrito, el concejal Carlos Izquierdo, afecto a Aguirre.