TRAMA DE CORRUPCIÓN

La Generalitat Valenciana pagó cuatro millones a la trama de Correa

Orange Market ganó entre 2005 y 2009 la organización de 20 actos en las ferias turísticas importantes en las que participó la región. Cultura firmó también un contrato cuando Aguirre era ministra

Orange Market, la filial en Valencia de Francisco Correa que ha organizado todos los actos del PP en la comunidad durante los últimos años, tenía una relación muy estrecha con la Consejería de Turismo, hasta el punto de que la Generalitat le adjudicó, sin interrupción y durante cuatro años, concursos por valor de más de cuatro millones para que montara y gestionara los 'stand' de la comunidad en las más importantes ferias del país. Según los informes y contratos con los que trabaja la Unidad de Delincuencia Económica y Financiera (UDEF), la empresa que dirigía el imputado Álvaro Pérez Alonso se llevó 4.148.595 euros de las arcas públicas en cuatro grandes concursos entre diciembre de 2005 y 2009.


El pasado 15 de enero, apenas 20 días antes de que explotara la operación Gürtel, el subsecretario de la Consejería de Turismo de Valencia, Jorge Juan Muñoz Gil, firmó una adjudicación a Orange Market de 915.820 euros. El objeto del contrato, el último conocido a favor de la supuesta trama, era el "suministro de diseño, montaje y desmontaje de un 'stand' ferial destinado a presentar la oferta turística de la Comunitat Valenciana" en las cinco citas más importantes que se van a desarrollar este año en ese campo: la Feria Internacional del Turismo (Fitur), la Feria Internacional del Turismo Comunidad Valenciana (TCV), Expovacaciones, el Salón Internacional del Turismo de Cataluña (SITC) y la Feria Internacional del Turismo de Interior (Intur). El Gobierno justificó la concesión por ser la "oferta económica más ventajosa en función de una pluralidad de criterios".


No es la primera vez que la marca valenciana del entramado se hacía con el jugoso negocio de organizar y gestionar las carpas de la comunidad en todas las ferias. Su 'racha de suerte', que duró hasta el mes pasado, comenzó en diciembre de 2005, un año y medio después de que Camps llegara a la Presidencia y cuando ya la dirección nacional del PP había roto toda relación con Correa y los suyos tras constatar que hablaban en nombre del partido sin autorización en algunos ayuntamientos de Madrid.


Por aquellas fechas, la entonces subsecretaria de la Consejería de Turismo, Alida Mas Taberner, otorgó a Special Events su primer gran contrato: 1.083.925 euros para gestionar los 'stand' de Valencia en las cinco ferias que se iban a celebrar en 2006. Otro subsecretario de Turismo, Carlos Alberto Precioso, aprobó el 21 de diciembre de 2006 la entrega de 1.089.600 euros a Orange Market para las ferias del año siguiente. Y en enero de 2008, Muñoz Gil aprobó la adjudicación de 1.059.250 euros, siempre a la misma empresa bajo sospecha y para la participación en las ferias.


Ministerio de Aguirre


De forma paralela a los negocios de la trama en Valencia, los expertos de la Policía Judicial siguen investigando los chanchullos en Madrid de las 23 empresas presentes en el sumario del juez Baltasar Garzón. Las últimas pesquisas de la UDEF han llevado hasta Pasadena Viajes, la primera firma que tuvo bajo su control Francisco Correa, y la empresa que organizaba habitualmente los desplazamientos de políticos y periodistas durante las campañas electorales del PP.


Entre los primeros grandes contratos que esta firma obtuvo con la Administración de manera simultánea a su colaboración con el PP es una adjudicación el 29 de abril de 1998 por 69.565.000 de las antiguas pesetas (419.066 euros) por parte del entonces director general de Deportes, Santiago Fisas, del Ministerio de Educación y Cultura que entonces dirigía Esperanza Aguirre.


El Ministerio, por procedimiento de urgencia, encomendó a la todavía modesta agencia la organización del "alojamiento en régimen de pensión completa de los participantes en la fase final del Campeonato de España Escolar" que se desarrolló en Murcia entre 13 y el 19 de junio de 1998. En los años siguientes, el Departamento, que ya no estaba dirigido por Aguirre, encomendó el acto a empresas de viajes líderes del sector.