BARÓMETRO

Se reduce la ventaja electoral del PP

La encuesta del CIS es "más de cocineros que de sociólogos", denuncian los populares.El actual Gobierno es el peor valorado de la democracia, y Duran i Lleida el político que logra mejor puntuación.

José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, en las escaleras de acceso a La Moncloa.
Zapatero y Rajoy son incapaces de ofrecer una imagen de unidad frente a la crisis
DOMINIQUE FAGUET/AFP

Mariano Rajoy ya no puede confiar en que la crisis económica le lleve en volandas a la victoria electoral. El líder de la oposición conoció ayer que la ventaja que hasta ahora otorgaban a su partido los sondeos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) se ha consumido de manera notable. En tres meses, ha pasado de superar al PSOE en casi cuatro puntos a sacarle únicamente 1,5. De haber habido legislativas entre el 6 y el 14 de abril, el PP se habría alzado con el 39,5% de los votos, frente al 38% de la formación que encabeza José Luis Rodríguez Zapatero.

Lo más preocupante para los populares es que en ningún caso cabe pensar que semejantes cifras sean flor de un día. Al contrario. Con su último estudio, el instituto de opinión ha venido a confirmar una tendencia. En octubre de 2009, el PP llegó a tener una intención de voto del 41% que en enero ya se había reducido hasta el 40%. Ahora es medio punto inferior. El PSOE se mueve en otros parámetros. Su peor pronóstico, hasta la fecha, fue el del pasado enero, con un 36,2% (es decir, siete puntos y medio por debajo del resultado de las generales).

El recorte coincide con una semana crucial. Durante los días en los que se realizó la encuesta -del 6 al 14 de abril- se levantó el secreto del sumario del caso Gürtel con datos comprometedores para el tesorero del PP e informes policiales que apuntaban a una financiación irregular del partido en Valencia. No fue, en cambio, mal momento para el Gobierno: se conocieron datos positivos sobre consumo y se aprobó un paquete de medidas económicas pactadas con los grupos parlamentarios, aunque también se supo de un nefasto dato del paro (4,17 millones de desempleados) y del rechazo de los sindicatos a su propuesta de reforma laboral.

El caso es que, como lluvia fina, los supuestos casos de corrupción empiezan a calar en el ánimo de los votantes. El pasado 29 de abril, el partido opositor aprovechó un encuentro con sus líderes provinciales en Zaragoza para presentar un informe en el que aseguraba que no habría coste electoral alguno y descansaba en que el PP es el partido con mayor fidelidad de voto de todos los del arco parlamentario. El CIS obliga a revisar esa confianza.

Es cierto que nadie tiene unos electores tan fieles como la formación que preside Rajoy, pero también lo es que se le ha abierto una fuga. Si en enero el 81,8% de ellos aseguraba que volvería a votar a los conservadores, ahora la cifra ha disminuido hasta el 74,1%, es decir, es casi ocho puntos menos. El PSOE, en cambio, se mantiene en un rango similar al de enero: el 61,2% de sus electores sostiene que votará de nuevo estas siglas.

Duran i Lleida, el más valorado

Que el caso Gürtel tiene algo que ver con esta caída parece claro. El PP se quejó, de hecho, de que el CIS hiciera coincidir el estudio de campo con el levantamiento del sumario. Aunque las fechas escogidas no tienen nada de inhabituales, su impacto puede leerse en datos como que el 62,1% de los votantes de Rajoy considera que su partido "está implicado en muchos casos de corrupción". Además, más de la mitad de sus simpatizantes, el 51,8%, lo define como un partido "dividido y con conflictos". A su favor, los populares cuentan con un único elemento: una mayoría cree que tiene más gente "suficientemente preparada para gobernar" que el PSOE (29,6% frente a 28,2%).

Tampoco es que Zapatero pueda echar las campanas al vuelo. Al margen de que los datos del CIS correspondan al mes pasado, tiene motivos por los que preocuparse. Su Gobierno es el peor valorado de la democracia en los registros publicados del instituto demoscópico. El 52,2% de los ciudadanos y casi un cuarto de los votantes del PSOE califican su gestión de mala o muy mala. Otra novedad es que, por primera vez, el líder político mejor valorado es el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida.

"Mucho refrito y rebozado"

A la vista de los resultados de la encuesta, el responsable de Comunicación del PP, Esteban González-Pons, aseguró que el barómetro del CIS, despojado de su "sesgo filosocialista", daría una ventaja a su partido entre cinco y seis puntos por delante del PSOE. Pons, que anunció que el PP pedirá explicaciones públicas por el "uso partidista" del CIS, dijo que es "una encuesta más de cocineros que de sociólogos, pero con mucho refrito, mucho aceite y mucho rebozado".

Mientras tanto, ayer, Rajoy afirmaba que "todas las posibilidades están abiertas", en referencia a la posible presentación de una moción de censura al Gobierno o al aumento de la presión política para abocar al Ejecutivo a unas elecciones anticipadas, tal como reclaman desde hace días dirigentes de su partido e incluso de otros como CiU. Rajoy se mostró cauto, sabedor de que no lograría una mayoría parlamentaria para censurar y desbancar a Zapatero.