El Consejo de Estado remitirá en diciembre al Congreso el estudio sobre la reforma electoral solicitado por el Gobierno. Ese documento será la base jurídica para los trabajos de la subcomisión parlamentaria creada a tal efecto y que celebró su primera reunión deliberativa.

La comisión de estudios del Consejo de Estado, según fuentes jurídicas, tiene "bastante avanzada" la redacción del informe reclamado por el Ejecutivo para acometer la reforma electoral. El Gobierno anunció el 7 de mayo que la revisión de la normativa era una de las prioridades de la legislatura, aunque tardó mes y medio en solicitar el estudio al órgano consultivo. El Consejo de Estado, a su vez, se tomó el encargo la labor con calma y calcula que hasta fin de año no tendrá el trabajo listo.

El Congreso, a su vez, tampoco ha mostrado tener prisa por tratar la reforma del sistema electoral. El pleno de la cámara acordó el pasado 10 de septiembre constituir la subcomisión de estudio, pero no ha sido hasta ahora cuando se ha celebrado la primera reunión de los ponentes. Los dos partidos mayoritarios no están entusiasmados en modificar un modelo que beneficia el bipartidismo, pero la cercanía de las elecciones gallegas, previstas para marzo, impulsó al PP a moverse para que en esos comicios se aplique una nueva regulación del voto inmigrante.

Ése es una de los aspectos que debatirá la subcomisión. La propuesta aprobada por unanimidad en el Parlamento de Galicia establece que los españoles residentes en el extranjero voten en urna para acabar con el obsoleto sistema por correo, que, además, se presta con facilidad a las irregularidades. El PP y el Bloque Nacionalista Galego pretenden llegar a un acuerdo sobre el nuevo sistema para que se tramite en el Parlamento antes de los comicios autonómicos.

Quince días

El PSOE, sin embargo, no comparte la urgencia y cree que son prioritarias otras tareas, entre ellas aprobar el voto de los emigrantes en España para las elecciones municipales. Así las cosas, los comisionados no llegaron a ningún acuerdo concreto y sólo convinieron darse un plazo de 15 días para que cada grupo haga llegar al presidente de la subcomisión, Alfonso Guerra, sus propuestas de reforma. Con ese material, el coordinador de los ponentes propondrá una metodología de trabajo.

Los socialistas, además del voto de los emigrantes, pretenden crear una circunscripción única de los españoles en el extranjero para que tengan representación propia en las Cortes. Los nacionalistas catalanes y vascos, a su vez, aspiran a que la autonomía sea la circunscripción para las elecciones europeas.

Izquierda Unida y Unión, Progreso y Democracia han planteado, por su parte, crear un colegio electoral único en España en combinación con las circunscripciones provinciales. Con este modelo, los escaños del Congreso pasarían de 350 a 400, cifra permitida por la Constitución.