CUENTAS PÚBLICAS

El Congreso aprueba gracias al PNV y CC los Presupuestos que salvan a Zapatero

Las cuentas públicas serán rechazadas por el Senado, pero el Gobierno levantará el vetoEl Ejecutivo llega a la Cámara alta sin dinero para negociar modificaciones o enmiendas.

La previsión se ha cumplido punto por punto. El Congreso aprobó ayer los Presupuestos del Estado para 2011, que aseguran un año de estabilidad política al Gobierno y que salvan al presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, de un adelanto electoral que buena parte de las fuerzas políticas veían más que probable el pasado verano.

El rodillo parlamentario de los socialistas y sus socios nacionalistas, PNV y Coalición Canaria, permitió al Gobierno no perder ni una sola de los cientos de votaciones de enmiendas al proyecto y rechazar en el pleno el 'no' de todo el resto de la oposición, el PP, CiU, ERC, IU, BNG, UPyD, Na-Bai y UPN, al texto del Ejecutivo.

El pacto entre socialistas y nacionalistas, que suma 177 votos en el Congreso, uno por encima de la mayoría absoluta, asegura además la aprobación definitiva de los Presupuestos, ya que constituye un apoyo suficiente para levantar el veto que casi con toda seguridad impondrá al texto en las próximas semanas el pleno del Senado. El rechazo de las cuentas públicas por la Cámara alta es muy probable porque los partidarios del 'no' cuentan con mayoría absoluta en sus bancadas. Sería el cuarto veto a las cuentas en cinco años. El proyecto rechazado regresará al Congreso, que, entre el 21 y 23 de diciembre, levantará el veto y le dará la luz verde final.

Reducción del déficit

La solidez del acuerdo presupuestario quedó en los dos últimos días fuera de toda duda, según afirmó ayer el portavoz del PNV, Josu Erkoreka, quien destacó que los nacionalistas, en contra de su trayectoria, votaron el martes y el miércoles junto al Gobierno para derrotar las enmiendas de UPN e IU, respaldadas por el resto de la oposición, que exigían al Ejecutivo que no aplicase la congelación de las pensiones prevista para el año próximo.

Los Presupuestos aprobados siguen la política de drástica reducción del déficit público reclamada por la Unión Europea y materializan el recorte del gasto del Estado aprobado en mayo, que bajó el sueldo de los funcionarios, redujo el gasto ministerial y las inversiones, y congeló las pensiones.

Para el portavoz socialista, José Antonio Alonso, la aprobación de las cuentas lanza a las instituciones y mercados internacionales un mensaje sobre la "estabilidad y solvencia financiera" de España en un momento en el rebrotan los ataques a la deuda. Para su homólogo popular, Cristóbal Montoro, el proyecto no es más que "un desastre" que tendrá que arreglar el PP cuando gane las elecciones de 2012.

El Gobierno y sus socios rechazaron en pleno y comisión más de 2.500 enmiendas de la oposición, en su mayoría del PP, y aceptaron unas 200 de CiU, ERC, IU y BNG.

El principal beneficiado del pacto presupuestario es el PNV que, además del compromiso de traspaso de 20 competencias, obtuvo 162 millones de euros adicionales para inversiones industriales, en infraestructura y en innovación para el País Vasco. Los canarios lograron 26 millones en inversiones y diversas concesiones políticas. La austeridad de las cuentas provocó que el coste de las enmiendas adicionales introducidas por el PSOE se limitase a solo 40 millones, uno de los más bajos que se recuerdan, y que el Gobierno llegue con el texto al Senado, por primera vez en muchos años, sin un solo euro en el cajón para negociar modificaciones o enmiendas.