ACTUABA EN EE.UU.

Detenido por estafar en nombre de la Iglesia

El estafador se hacía pasar por representante de una organización benéfica en Estados Unidos.

Agentes de la Policía Nacional y oficiales de enlace del FBI detuvieron ayer en la Gran Vía de Madrid a un estafador buscado por EE. UU. que aprovechaba la reputación de una famosa fundación ligada a la Iglesia para imitar su nombre y hacerse pasar por responsable de una organización caritativa del Vaticano.


Fuentes de la investigación explicaron que el detenido, que habría podido estafar 1,3 millones de dólares (aproximadamente un millón de euros), había creado una organización ficticia, la Fundación Martín de Porres International, con la que supuestamente recaudaba dinero para niños con necesidades, principalmente en países de Sudamérica.


Según la Policía, el arrestado, de nacionalidad boliviana y que se alojaba en un céntrico hotel madrileño, también prometía altos intereses por el dinero, gracias a una estafa piramidal clásica por la cual los altos intereses se pagan con las cantidades aportadas por los nuevos inversores.


En un principio la pirámide funciona, pero cuando baja el ritmo de nuevos inversores todo se derrumba, ya que no es posible devolver las cantidades aportadas.


El engaño se articulaba sobre supuestas inversiones en varios paraísos fiscales que "garantizaban" un beneficio de, al menos, el 100 por 100 de la cantidad inicial, que sería devuelta en un plazo de 35 días. La información se ofrecía a través de correo postal, electrónico o llamadas telefónicas, según fuentes policiales.


Pago de beneficios


Se calcula que la supuesta fundación obtuvo 1,3 millones de dólares, cantidad que nunca fue invertida, prestada o distribuida para fines sociales. Muy al contrario, el dinero se destinaba a pagar los beneficios a otros inversores y también a enriquecer al detenido y a sus asociados.


La investigación sobre esta supuesta fundación se inició en el mes de marzo del año pasado y varios meses más tarde la Fiscalía del distrito sur de Nueva York emitió una Comisión Rogatoria Internacional.


Así, los investigadores descubrieron que el detenido, de 70 años e identificado con las siglas R. L., residía en un hotel del centro de Madrid.


En la detención participaron oficiales de enlace en Madrid del FBI e investigadores del Grupo de Localización de Fugitivos de la Comisaría General de Policía Judicial.