VACACIONES DE LA PRIMERA DAMA

"Bienvenida a Marbella, missis Obama"

Una agencia de comunicación especializada en turismo valora en 800 millones de euros el impacto publicitario en todo el mundo de la visita a Marbella de Michelle Obama y su hija menor, que llegan mañana.

El cartel de bienvenida
"Bienvenida, missis Obama"
AFP PHOTO

"Welcome Obama Family. Thank you for choosing Marbella". El gran cartel de bienvenida y agradecimiento que aguarda a Michelle Obama a la entrada de Marbella da cuenta del interés que generan las cortas vacaciones, hasta el próximo domingo, que pasará la mujer del presidente de Estados Unidos en una zona conocida por acoger a ricos y famosos, a jeques y príncipes árabes. Michelle, de 46 años, y su hija pequeña, Sasha, de nueve, llegan mañana a Andalucía, donde las vacaciones de la primera dama de Estados Unidos han despertado gran expectación. Y también la esperanza de que, en plena crisis económica, su estancia en un lujoso hotel cercano a Marbella deje beneficios más allá de las paredes del exclusivo establecimiento. Además de visitar a los Reyes en Mallorca el último día, es muy probable que vayan a Granada para ver la Alhambra.

En Marbella se hospedarán en el hotel Villa Padierna, uno de los mejores del mundo, con precios que oscilan entre los 300 y los 5.000 euros por noche. El viernes coincidirán allí con la actriz estadounidense Eva Longoria y con el actor español Antonio Banderas, padrinos de una fiesta benéfica.

Con aires de villa más propia de la Toscana y cipreses en sus jardines, el hotel cuenta con un spa de mil metros cuadrados y paredes revestidas de oro, acogedores jardines, piscina, un anfiteatro... Y su interior es como un museo: casi 3.000 obras de arte, desde la Antigua Roma hasta la actualidad, se distribuyen por el complejo, rodeado por tres campos de golf.

De las 130 habitaciones, entre ellas suites y villas con mayordomo propio, la delegación estadounidense ha reservado entre 30 y 50, ya que la primera dama estadounidense y la hija pequeña de Barack Obama van acompañadas por una numerosa delegación en la que predomina el personal de seguridad. De hecho, estos días hay ya agentes estadounidenses dando vueltas por la zona.

Michelle y Sasha llegarán el mismo día en el que el presidente de EE. UU. cumple 49 años. muchos confían aún en que Obama llegue por sorpresa a Marbella.

Todas las administraciones son conscientes de la repercusión que tendrá la estancia de las Obama en Marbella. "La primera dama podría haber viajado a cualquier parte del mundo y ha elegido Marbella", se congratula la alcaldesa de la localidad, Ángeles Muñoz. "Es una publicidad impagable", dicen fuentes de la administración regional andaluza.

Un estudio de una agencia de comunicación especializada en turismo valora de hecho en 800 millones de euros la publicidad que Marbella tendrá en todo el mundo gracias a la información de televisiones, radios y prensa sobre las vacaciones de Michelle Obama. Se calcula que se harán eco de la visita 660 televisiones, 2.500 periódicos, 2.100 medios digitales, 900 radios, 950 revistas generales y 900 del corazón.

La visita de la mujer de Obama servirá también para mejorar la imagen de la localidad, golpeada por los escándalos urbanísticos y la corrupción. "Siempre ha sido un destino muy sólido y con una marca internacional muy potente que, no obstante, vivió una situación política e institucional muy compleja", indica su alcaldesa. La visita de Michelle Obama es "la prueba de que con trabajo y esfuerzo y con un proyecto serio se pueden alcanzar éxitos tan notables como el que se va a vivir en Marbella en los próximos días".

De hecho, ya hay efectos positivos y eso que Michelle aún no ha llegado. Las agencias estadounidenses están cambiando el destino de viajes que inicialmente iban a tener lugar en Italia y Grecia pero que ahora se trasladan a Marbella. "La noticia para nosotros en Estados Unidos es una bomba", dice el presidente de la Asociación Empresarial de Agencias de Viajes de Andalucía, Pedro García. Lo corrobora Antonio Manuel Luna, otro empresario del sector turístico andaluz: "En España no seguimos los pasos de nuestro presidente. Pero en EE. UU., sí. Si los Obama ponen de moda un destino, sus compatriotas lo refrendan con su presencia".